Mientras Silvina Luna pelea por su vida en el Hospital Italiano, el médico cirujano Aníbal Lotocki rompió el silencio y brindó una entrevista en el piso de Telenoche este miércoles.
“Tengo más de 20 años en el quirófano, pero no soy cirujano plástico, mis pacientes lo saben”, reconoció el médico.
Entre los puntos destacados de su intervención señaló que Silvina Luna se operó tres veces con él: dos para agrandar glúteos y una tercera para disminuir el tamaño. En todo momento negó que haberle inyectado metacrilato haya derivado en su enfermedad renal.
Según Lotocki, Luna se había hecho una gamaglobulina un año antes de operarse en donde aparece una globulopatía, que “suelen terminar en insuficiencia renal”.
“Al operarla no sabíamos, porque nosotros pedimos un prequirúrgico habitual, no ese tipo de estudios más complejos”, dijo.
Además, acusó indirectamente a Luna de haber escondido aquel problema de glóbulos. “Hay muchos pacientes que esconden sus enfermedades para ser operados igual. Nosotros no podemos pedirle tantos estudios. De todos mis pacientes Luna es la única que tiene insuficiencia renal”, expresó.
En cuanto al uso del polimetilmetacrilato dijo que él no suele aparecer en los medios para hablar de eso porque nunca muestran sus pruebas: “Lo expliqué innumerables veces: este producto estaba aprobado en la colocación en glúteos al momento de la operación de Silvina Luna”.
“No tengo que pedir perdón por usar un producto permitido”
Y agregó: “A mí no me condenaron por las enfermedades de estas chicas. También se descartó que el producto no estuviera aprobado”.
También aseguró que a los pacientes se les explica mucho tiempo antes las consecuencias. “Le explicamos todo sobre una cirugía. Además, firma un consentimiento. Que alguien diga que no conoce o no sabía, me parece raro”, señaló.
“Hace mucho tiempo no usamos más este producto. De haber sabido que podía producir un problema, no lo hubiésemos usado”, se defendió.
Lotocki señala que “hasta 2015 no existía ninguna prueba de que el metacrilato podía producir estos problemas”.
“La condena es por lesiones pero no por la insuficiencia renal de Luna. Sigo habilitado mientras la condena esté en revisión”, dijo.
Ante la pregunta de por qué no pidió perdón a quiénes dijeron que les arruinó la vida, expresó friamente: “No tengo que pedir perdón por usar un producto permitido. Pero, bueno, pido perdón por usar un producto permitido que le ocasionó problemas”.
Siguiendo con su defensa, el médico señaló que colocó el producto a decenas de mujeres, que incluso su esposa actual lo tiene y “no tuvo nunca ningún problema”.
“Yo siempre dije lo mismo: sólo utilicé un producto permitido. En todo caso, debería hacerle yo un juicio a la Anmat”, expresó.
Para terminar, el médico señaló que “no está tomando pacientes nuevos”, que solo cumple con compromisos de pacientes anteriores. “No me siento cómodo conmigo, con toda esta situación”, señaló.