Wanda Nara atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida personal y mediática: una feroz batalla legal contra Mauro Icardi por la tenencia de sus dos hijas, Francesca e Isabella. La disputa, que se desató tras la ruptura definitiva de la pareja hacia finales de 2024, escaló rápidamente hasta convertirse en una auténtica guerra judicial y mediática, marcada por tensiones crecientes, acusaciones cruzadas y un sinfín de especulaciones en la prensa.
Lo que comenzó como una separación anunciada de forma escueta en redes sociales pronto se transformó en una novela de alto voltaje emocional. Desde entonces, el conflicto ha ido adquiriendo un tono cada vez más violento y preocupante, no solo por el tenor de las declaraciones públicas de ambas partes, sino también por la filtración de distintos documentos legales que forman parte de la causa por la custodia de las niñas.

A medida que avanzan los días, la situación se torna más compleja. Las redes sociales y los medios de comunicación siguen minuto a minuto los pasos de la mediática y del futbolista, quienes se acusan mutuamente de manipulación, maltrato y estrategias judiciales para dañar la imagen del otro. Además, varios episodios polémicos protagonizados por ambos –tanto en lo privado como en lo público– no hicieron más que agravar el escenario, encendiendo las alarmas entre los seguidores y generando preocupación por el bienestar de las niñas.
En este escenario, Wanda se vio obligada en los últimos días a facilitar que sus hijas se reencontraran con Mauro, dando inicio al proceso de revinculación. El objetivo de esta instancia es que las niñas retomen un vínculo estable y saludable con su padre. Sin embargo, lo que debería ser un paso hacia la armonía familiar se ve empañado por un detalle escandaloso: la fuerte hostilidad y tensión con la que se relacionan los exesposos.

En el marco del proceso judicial, el bienestar de Francesca e Isabella se ha convertido en uno de los ejes centrales de la disputa. Las menores fueron sometidas a diversas evaluaciones psicológicas con el fin de analizar cómo es el vínculo que mantienen con cada uno de sus padres. A partir de los informes elaborados por los profesionales intervinientes, la Justicia podrá tomar una decisión fundamentada sobre su futuro y sobre qué será lo más conveniente para su desarrollo emocional.
En las últimas horas, Luis Bremer fue quien reveló detalles sobre el estado de salud de las hijas de Wanda Nara e Icardi, luego de haber tenido acceso a material confidencial de la causa. El periodista expuso algunos aspectos de los estudios realizados tanto a Francesca como a Isabella. Aunque no especificó cuál de las dos menores fue objeto de los análisis, sus declaraciones causaron un gran revuelo y pusieron aún más foco en el bienestar emocional de las niñas.
La evaluación del juez de menores que analizó a Francesca e Isabella Icardi
“El juez de menores se basa en los exámenes realizados a las menores, pero no vamos a dar nombres. Sin embargo, vamos a mencionar algunos detalles de los tres tests que se les hicieron. No se trató de una entrevista psicológica tradicional, sino que se utilizaron dibujos, y también un perro de compañía que ayuda a reducir el estrés”, explicó el periodista durante su intervención en A la tarde, el programa de Karina Mazzocco en América.
Luis Bremer profundizó en los resultados de las pericias psicológicas realizadas a las hijas de Wanda Nara y Mauro Icardi, y compartió una frase impactante que proviene directamente de esos informes. “Una de estas personas me dice… ‘presenta elevadísimos niveles de tensión, ansiedad y hostilidad. Sentimientos de inadecuación, desvalorización, baja autoestima y considera inalcanzable la felicidad hogareña. También inmovilidad, retraimiento, culpa y preocupación’”, relató el periodista, dejando en evidencia la delicada situación emocional que atraviesa al menos una de las menores.
Bremer continuó revelando fragmentos del informe con un dato que dejó a todos en silencio en el piso de A la tarde. “Lo que más me preocupó es cuando, acá hay un perito psicológico, que dice que tiene tendencias autoagresivas y dolencias psicosomáticas”, concluyó el periodista, visiblemente afectado por la gravedad de la situación.