Estridente, carismático, hombre de negocios y de gustos hilarantes fueron algunas de las características de Ricardo Fort que lo lanzaron a la fama en el mundo de la farándula argentina y que muy pronto lo convirtieron en una de las figuras favoritas de la televisión. Su legado es continuado por sus hijos, Martita y Felipe Fort, de más bajo perfil pero igual de queridos en el medio y por el público.
Los mellizos acaban de cumplir los 18 años, por lo que desde hace algunos meses pudieron acceder a su porción de la fábrica chocolatera heredada de su padre. Empapados del universo empresarial desde pequeños, recién ahora pueden participar de la toma de decisiones y ya se mostraron muy comprometios con el crecimiento de la compañía gracias al aporte de originales idea como agrandar el tamaño de las golosinas preferidas de los consumidores.
En medio de sus agendas plagadas de viajes, paseos por Miami, recitales internacionales y autos de lujos, el recuerdo de su padre continúa marcando el rumbo de sus vidas de manera constante y así lo demostró Martita Fort al revelar en sus redes un gran homenaje que le rindió a su Ricardo Fort.
La joven de 18 años compartió a través de una historia que lleva tatuada en su piel el dibujo de un escorpión, en referencia al signo del zodíaco de su papá nacido el 5 de noviembre. Ante la pregunta de si es escorpiana, la joven influencer respondió: “Soy de piscis, me lo tatué por mi papá”.
El sueño de Martita Fort
La joven heredera también reveló cómo es su rutina cada vez que se encuentra en la Argentina. Según contó pasa sus días entrenando, entre clases de canto, juntadas con amigos y visitas a su empresa. Pero sorprendió al revelar que su sueño es dedicarse a la música.
Ante la pregunta de un seguidor de cuándo saldrá su primera canción, Martita respondió expectante: “Me estoy formando todavía, pero en algún momento”.