Rocío Oliva y Gianinna Maradona protagonizaron un tenso cruce durante el fin de semana. Ambas, unidas por la misma pasión, terminaron frente a frente.
Es que la hija y la expareja de Diego Maradona coincidieron en Club Zone de San Miguel, donde Pablo Lescano y su conjunto Damas Gratis brindaron un recital.
Ambas se ubicaron a los costados del escenario, una a la derecha y la otra a la izquierda, en un espacio similar a un sector VIP de invitados.
Mientras Lescano cantaba sus éxitos "Me vas a extrañar" y "No te creas tan importante", la hermana de Dalma lo filmaba en vivo y lo transmitía a través de sus historias de Instagram. Lo mismo hacía del otro lado del escenario la futbolista del Club Atlético River Plate. Lo curioso es que, gracias a la perspectiva desde la que fue tomada la imagen, el video de Gianinna muestra a Oliva al otro lado del cantante.
El enfrentamiento entre ambas comenzó en 2017 cuando, después de que Gianinna se acercara a su hermano Diego Fernando, hijo de su padre y de Verónica Ojeda, Oliva habría hecho un comentario desubicado sobre su hijo Benjamín Agüero.
"Decile a la conchuda que tenés al lado, a esa pendeja de mierda, que ojalá nunca me la cruce porque la voy a desfigurar. Decile bien, que le muestren mi Twitter porque la voy a cagar a trompadas", le decía Gianinna a su padre y explicaba que su furia tenía que ver con una actitud de Rocío con su hijo Benjamín.
"Me parece una pendeja de mierda. A ella le molestaba que me acerque a mi hermanito por su mamá. Rocío se metió en un terreno que no debe meterse nadie en la vida. Tiene que ver con mi hijo. Y mi guerra con ella va a ser judicial", explicaba en ese entonces, después de que se hiciera público el audio.
Luego, ese mismo año, se dio a conocer una nueva grabación que Rocío le había mandado a Maradona y por el cual Gianinna había denunciado amenazas. "Sé adónde va a bailar tu hija Giannina. Y ahora voy a ir a bailar ahí todos los fines de semana, hasta que me la encuentre. Y cuando me la encuentre te la cago a trompadas. Mirá que nosotras somos muchas, eh. Y vos sabés que es así. Ahora vos me vas a conocer, y tus hijas también. A mí no me rompe las pelotas nadie", le decía Rocío a su pareja.
Afortunadamente, pese a su enemistad, el gusto por la música las mantuvo en paz.