El Síndrome de Asperger volvió a ser noticia en los medios argentinos después de que el periodista Mauro Szeta denunciara que su nieto no es aceptado en ninguna escuela por padecerlo.
El periodista especializado en policiales contó: "Estoy muy dolorido, triste. Es un drama que atraviesan muchos pibes. Luca es mi nieto, tiene 6 años, y tiene que empezar primer grado. Tiene Trastorno del Espectro Austista (TEA) y ahora lo diagnosticaron con Asperger. Ese cambio de diagnóstico hizo que tengamos que cambiarlo de colegio". Según explicó, la escuela a la que acudía el pequeño en jardín lo tildó de "agresivo" cuando le pidieron referencias.
El Asperger es un trastorno que está dentro del Trastorno del Espectro Autista (TEA), pero es un autismo de alto rendimiento que se caracteriza porque el paciente manifiesta intereses limitados o una preocupación inusual y obsesiva con un objeto o un tema en particular, llegando a excluir otras actividades y temas de conversación. Las personas que lo padecen suelen tener una inteligencia normal o ligeramente por encima de la media, pero muestran rutinas o rituales repetitivos, así como una tendencia a hablar de manera demasiado formal o monótona y a interpretar figuras retóricas e ironías de manera literal.
En general, su lenguaje corporal es inexistente y exhiben un comportamiento social y emocionalmente diferente y se muestran incapaces de interactuar exitosamente con los demás. La torpeza física y la ausencia de empatía hacia los demás son otros rasgos característicos de la condición.
Un ejemplo de las características de una persona con este trastorno es Sheldon Cooper, el personaje (no el actor) de la serie The Big Bang Theory. Aunque muestre un Asperger exagerado, su popularidad ayuda a dar visibilidad a este trastorno que afecta a 3 de cada 1000 personas y que tiene mayor incidencia en niños que niñas.
El Asperger explicaría las estrictas rutinas diarias del Dr. Cooper, su dificultad para socializar y su aparente indiferencia emocional por los demás; así como la interpretación literal del lenguaje que le dificulta entender bromas, doble sentido, o sarcasmo.
El síndrome se manifiesta de diferente forma en cada individuo pero todos tienen en común las dificultades para la interacción social, dificultades para entender la comunicación no-verbal, intereses restringidos, inflexibilidad cognitiva y de comportamiento, y problemas en la interpretación de los sentimientos y emociones ajenos y propios.
La otra cara de este síndrome son ciertas cualidades que los convierten en candidatos idóneos para algunos trabajos. La mayoría tiene una inusual capacidad de concentración, son muy competentes en sus áreas de interés, tienen gran habilidad para apreciar los detalles, y suelen tener muy buena memoria. Les gusta la rutina y son transparentes, no mienten, carecen de malicia.
"El Asperger está dentro del espectro autista porque, sobre todo, las áreas sociales están descendidas. Cuando se toma un test de inteligencia en general las áreas lógico matemática o de lenguaje están muy altas pero las demás están bajas", explica la Licenciada en Psicopedagogía Julieta Demarco, y aclara: "Sobre todo se manifiesta en las cuestiones empáticas, en el percibir el sentimiento del otro, en poder manifestar un sentimiento propio".
"Son niños muy estructurados, contestatarios que, en general, usan un lenguaje mucho más desarrollado y les encantan las palabras difíciles. Además, suelen memorizar y tener mucho conocimiento en algún área, y se destacan en ciencias en matemáticas o en música", revela Demarco.
En esta línea, la Licenciada reconoce: "Personalmente he visto nenes corregir a sus propias maestras lo cual incómoda un poco, no tienen referencia de esos límites sociales o de cómo tratar a otros".
Sin embargo, "dentro del espectro son las personas con mayores posibilidades a futuro ya que logran graduarse de la escuela común con un título convencional y pueden hacerlo también en carreras técnicas y universidad".
En esa línea, la especialista explica que en Estados Unidos hay centros destinados a potenciar a estos niños porque algunos consideran que son los que más posibilidades tienen como científicos, matemáticos, músicos y los hacen estudiar esas áreas. Pero advierte que "mucho no los ayudan en su dificultades".
"Desde el gabinete, se trabaja con ellos las emociones, el lenguaje y la reconstrucción del error, porque se castigan mucho al equivocarse", explica Demarco.
"El primer paso para defender nuestros derechos frente a los neurotípicos es conseguir la fraternidad entre nosotros y no tolerar que algunos pocos quieran romper la integración que todo buen TEActivista busca", reconoce Ignacio Pantoja, Licenciado en biología por la UAM y máster en Neurociencias por la USAL, en una reflexión escrita para la Fundación Ángel Rivière.
Personalidades famosas como Steven Spielberg, Bill Gates o Susan Boyle padecen este trastorno y se cree que científicos como Albert Einstein o Isaac Newton, artistas como Miguel Ángel y músicos brillantes como Beethoven pudieron padecer el síndrome de Asperger.