Fingió su muerte y empezó una nueva vida en Brasil

Lo encontraron cuatro años después por una publicación en Facebook pero el caso ya había prescripto.

Fingió su muerte y empezó una nueva vida en Brasil

Hace casi siete años, el 2 de enero de 2011, Ariel Leites Do Santos se metió en las aguas del Río Uruguay, a la altura de Puerto Sánchez, para refrescarse en el calor misionero y nunca nadie más lo vio. Cuatro años más tarde, se supo a raíz de una foto en Facebook que Do Santos seguía vivo en la ciudad brasileña de Curitiba, donde había empezado una nueva vida como dueño de una empresa informática.

En Oberá, Misiones, nadie lo podía creer. Su aseguradora lo denunció pero la causa no pudo prosperar: el delito había prescripto y todos fueron sobreseídos. Fue el crimen perfecto, Do Santos había fingido su muerte para que su esposa y su ex socio, Luis Steciuk, pudieran cobrar el seguro de vida que había contratado.

A comienzos de 2015, cuando Leites Do Santos debió presentarse en el juzgado obereño, le dijo a los periodistas que se sentía "contento" y "muy feliz de volver a casa". Sobre la razón de su desaparición, dijo que "lo que hice fue siempre pensando en proteger a mi gente. Los que me conocen y siempre estuvieron conmigo saben lo que yo soy. Sé que ocasioné mucho daño, no fue mi intención. Gran parte de ese daño me fui enterando ahora, con una comunidad que yo no conocía, sé que sintió ofendida y afectada, no tengo otra que pedir disculpas y lo que tenga que resarcir lo haremos".

"Si bien hubo elementos que avalaron la imputación inicial, terminó pesando más la versión de Leites Do Santos, que argumentó que se tuvo que escapar porque temía por su vida", le dijo una fuente del caso al diario El Territorio. Sin embargo, nunca explicó a qué se refería. A mediados de noviembre, la jueza Alba Kunzmann de Gauchat, titular del Juzgado de Instrucción Uno de Oberá, resolvió sobreseer a todos los implicados por prescripción de la acción.