Si tuvieran que adivinar cuál es el único animal visible desde el espacio, es muy probable que las personas sugieran el elefante o la ballena azul debido a su gran tamaño. Sin embargo, esto no es así. Sorprendentemente, la respuesta correcta sería el coral porque, a diferencia de lo que muchos creen, no pertenece al mundo vegetal sino al animal.
Esta especie se alimenta del zooplancton y produce un residuo de naturaleza caliza con diversas y originales formas. Son animales pequeñísimos coloniales formados por varios miles de individuos que cuando mueren dejan sus estructuras cálcicas y eso, con el paso de miles de años, termina dando forma a lo que comúnmente denominamos arrecifes corales.
Otro curioso e interesante dato sobre estos animales es que junto con su pariente próximo, la anémona de mar, los corales fueron los primeros animales que vivieron en el mar, hace unos 800 millones de años.
Muchos corales requieren unas condiciones muy específicas para vivir, tanto referentes a la profundidad (luminosidad) como a la temperatura, salinidad y pureza del agua. Es por eso que varias especies han desaparecido o se encuentran en peligro de extinción.
Actualmente, el arrecife más grande del planeta Tierra es la Gran Barrera Coralina que se extiende principalmente por la costa oeste de Australia. También podemos hallarlos en ciertos lugares del Caribe, Brasil y la Polinesia.