En esta nueva edición de MasterChef se busca no solo a los mejores cocineros de la argentina, sino que también se buscan historias que conmuevan al público y que muestren la pasión por la gastronomía. Si bien el programa inició el lunes pasado, ya está repleto de participantes que se ganaron el corazón del público.
Una de ellas es la historia de Belén, quien llegó a MasterChef Argentina para cumplir su sueño. La cocinera de 30 años contó que sueña con ser cocinera, porque de chica pasó hambre.
“De chica pasé mucha hambre, entonces creo que viene por ahí, que me guste la cocina. A mí me abandonaron, me dejaron en una plaza, me agarró una familia. Vivíamos en un barrio muy precario, en una casilla. Éramos cartoneros, pedíamos pan de ayer en las panaderías. O sea, pasé hambre realmente. Y creo que desde el deseo de comer y de tener comida, me gusta, lo disfruto y amo comer”, explicó la participante mientras cocinaba un pollo al verdeo.
Además, explico de que quería estudiar cocina, pero que dejo ese sueño de lado para poder cuidar a sus 4 hijos, siendo MasterChef la revancha de esa meta. Actualmente, vive de campañas, pinturas y haciendo “un poco de todo”.
Belén preparó un pollo al verdeo, al que le agregó crema y vino blanco. Este plato género opiniones divididas entre Donato de Santis, Damián Betular y Germán Martitegui.
El primero en evaluar el plato fue Donato, quien le dijo que su pollo estaba bien cocinado. “Está bastante bien. Hay cosas para mejorar. Te salió bastante rico. Muy generoso y muy honesto con el plato. Te premio con un sí”, comento el chef italiano.
El segundo en opinar fue Betular, al cual no le gusto el plato. “Entiendo que hay un montón de nervios y un montón de cosas en juego, pero el plato es el que define, y para mí es un no”, manifestó el pastelero luego de probar el plato de la participante.
Con dos votos divididos, Martitegui era quien decidía si Belén se quedaba o no en la competencia. “No voy a hablar del plato. A mí me parece que vos te merecés esta oportunidad. Me parece que nosotros nos merecemos la oportunidad de tenerte cerca un rato y enseñarte a cocinar. Así que te voy a dar un sí”, concluyó el chef, quien le entrego el delantal confirmando su participación en esta nueva edición.
La participante fue una de las 53 participantes en pasar la ronda de selección, formando parte de los 24 clasificados para pasar a la siguiente etapa y ser uno de los 16 participantes definitivos del reality. Ella compite por 10 millones de pesos y el codiciado trofeo de MasterChef.