Las plantas tienen la capacidad de influir directamente en la energía del hogar. Algunas brindan bienestar, armonía o calidez, mientras que otras están asociadas a la negatividad.
Lo cierto es que hay algunas clases de plantas de interior que purifican el aire, eliminan toxinas y regulan la humedad ambiental: se trata de cinco tipos específicos que uno debería incorporar en el cuarto.
Además de lo estético, el dormitorio estaría plagado de aromas naturales como jazmín o lavanda. Por otro lado, ciertas variedades absorben sustancias tóxicas presentes en muebles, pinturas o productos de limpieza, regulando la energía del ambiente.
Desde TN, seleccionaron cinco plantas específicas que uno debería sumar a la habitación para disfrutar de sus beneficios
Las cinco plantas que deberías tener en tu habitación
La primera variedad es la sansevieria, también conocida como “lengua de suegra” o “cola de tigre”. Se destaca por sus hojas elegantes, su resistencia y el porte que suma al cuarto. Según un estudio de la NASA, ayuda a purificar y absorber sustancias como benceno, xileno, tolueno, tricloroetileno y formaldehído.
La segunda planta de interior es una clásica que siempre se regala y que nunca está de más: el potus. Se caracteriza por ser colgante y es perfecta para principiantes o personas que reniegan porque siempre se les mueren todas las plantas. No requiere muchos cuidados, es purificadora y elimina, como la anterior, sustancias tóxicas.
La tercera variedad es el espatifilo, conocido como “Lirio de la paz”. Además de eliminar toxinas, regula la humedad ambiental. Especialistas afirman que es capaz de destruir las esporas de moho que hay en las paredes. Como dato extra, tiene hermosas flores entre sus hojas.
La gardenia, con sus hojas brillantes y flores blancas, suma un aroma agradable, natural y fresco y favorece la relajación. Es necesario tener en cuenta que debe estar en un lugar cerca de la ventana, donde entren mucha luz y humedad.
La última planta que uno debería sumar al dormitorio es la valeriana, que decora y ayuda a conciliar el sueño con su fragancia. Expertos coinciden en que debería estar en un jarrón en la mesa de luz, cerca de la almohada.