Mario Pergolini, una de las figuras más reconocidas de los medios argentinos, siempre mantuvo su vida familiar alejada del ojo público. Sin embargo, recientemente sorprendió a sus seguidores al compartir una publicación en su cuenta de Instagram celebrando un importante logro de su hijo del medio, Matías, de 25 años.
En la imagen, se puede ver a Matías recién recibido como licenciado, posando con una amplia sonrisa en los pasillos de la facultad. “¡Qué orgullo!”, escribió Mario junto a la foto. “Esta es toda tuya. No soy de mostrar cosas públicas de nuestra familia, pero hay cosas que no se pueden dejar de festejar. Te queremos mucho, hijo. Y nunca está de más... ¡Vamos Boca!”, añadió, mezclando la emoción del momento con su característico humor.
Matías, el hijo de Mario Pergolini, hizo su propio camino en la música
A sus 25 años Matías, que muestra un notable parecido físico con su padre, decidió tomar un camino propio dentro del mundo del entretenimiento. Lejos de los medios tradicionales que hicieron famoso a su padre, Matías se ha enfocado en la música, trabajando como DJ y productor de eventos, especialmente dentro de la vibrante escena de la música urbana en Buenos Aires. Su pasión por la música reseonó en la familia Pergolini, donde el arte y la creatividad son moneda corriente.
A diferencia de su hermano mayor, Tomás, quien siguió los pasos de su padre en la radio, conduciendo su propio programa en Vorterix, Matías prefirió mantenerse detrás de las consolas, creando experiencias sonoras que captó la atención de los jóvenes de su generación.
La relación entre Mario y sus hijos siempre fue un tema de interés para el público, especialmente por la manera en que el conductor manejó la exposición mediática de su familia. En una entrevista reciente, Mario habló sobre cómo buscó mantener a sus hijos alejados de los focos, permitiéndoles crecer y desarrollarse en un entorno lo más normal posible, pese a su fama.
Además de Matías, Mario y su esposa Dolores Galán tienen otros dos hijos: Tomás, de 30 años, y Valentina, de 17. Cada uno tomó su propio camino, con Tomás inmerso en los medios y Valentina manteniendo un perfil bajo, siguiendo su propio ritmo lejos de la mirada pública.