Michelle Yeoh es una estrella la cual volvió a sonar con fuerza gracias al éxito de Todo a la vez en todas parte y con su nominación al Oscar, una película de acción en el multiverso en la que comparte protagonismo con Jamie Lee Curtis y que le dio el Globo de Oro a la Mejor Actriz de Comedia. Pero sus inicios no siempre fueron en el cine de acción.
Por el contrario de lo que muchos cree, sus inicios fueron en el modelaje. En su país natal, Malasia, no solo gano el concurso de belleza de Miss Malasia, incluso participo en Miss Mundo en representación de su país. A pesar de no haber llegado a ser finalista, estos fueron sus primeros pasos en el mundo del espectáculo.
Sin embargo, cuando apareció en un comercial de televisión junto al mismísimo Jackie Chan, despertó el interés de muchos productores cinematográficos. Entre ellos el director y productor Sammo Hung, quien le ofreció un papel en The Owl vs. Bombo, siendo esta su primera aparición en cine.
A partir de ahí, participó en varias películas producidas en Hong Kong. Postulando como una de las nuevas estrellas del cine en China. Sin embargo, cuando se casó con el productor Dickson Poon en 1988, se retiró de la actuación por casi cuatro años. Fue hasta 1992 y luego de divorciarse cuando Michelle Yeoh retomó su carrera.
Cuando regreso, protagonizo muchos papeles en películas de artes marciales, lo que la llevo a ser una de las mujeres más importantes del cine en Asia. Realizando sus propias acrobacias y escenas de acción sin necesidad de un doble.
Sin embargo, su estrellato mundial llego en 1997, cuando se quedó con el papel de Wai Lin, la espía china en Tomorrow Never Dies, la decimoctava película de James Bond, protagonizada por Pierce Brosnan. Dando como resultado que la revista People la seleccionada como una de las 50 personas más hermosas del mundo.
Luego, en el año 2000, protagonizo uno de sus roles más icónicos de su carrera. En su película El Tigre y El Dragón, dirigida por Ang Lee, dio vida a Yu Shu Lien. Del cual logro obtener una nominación al BAFTA como Mejor Actriz, dando como resultado la fundación de su propia productora, Mythical Films.
En 2005 se sumó al elenco de Memorias de una Geisha, una adaptación dirigida por Rob Marshall de la novela homónima que causó mucha controversia en Japón, ya que sus tres protagonistas (Yeoh, Zhang Ziyi y Gong Li) interpretan a geishas, aunque ninguna tenía ascendencia japonesa.
Michelle Yeoh continuó participando en películas como Sunshine de Danny Boyle, la tercera parte de La Momia: La tumba del emperador Dragon, Morgan junto a Anya Taylor-Joy, e interpretó a la Capitana Philippa Georgiou en Star Trek: Discovery; participó en Shang-Chi and the Legend of the Ten Rings y hasta prestó su voz para el personaje de la cabra adivina en Kung Fu Panda 2.
Pero el papel más importante de su carrera fuera el de Evelyn Wang, una mujer que existe en varios multiversos e intenta solucionar sus problemas personales. Yeoh se llevó varios premios por su rol, como el Golden Globe 2023 a Mejor Actriz en una película de comedia o musical, siendo una de las candidatas favoritas para quedarse con el Oscar.