Ana de Armas llevó el look más sofisticado en blanco y negro para modelar desde Grecia

La actriz es de las más delicadas a la hora de vestir, siempre con prendas elegantes que le quedan increíbles. Esta vez no fue la excepción y conquistó a todos.

Ana de Armas llevó el look más sofisticado en blanco y negro para modelar desde Grecia
Ana de Armas

Ana de Armas viajó a Grecia para asistir a un increíble evento de Louis Vuitton. Anteriormente, la actriz posó con la nueva línea de joyas de la firma de lujo. Ahora, volvió a modelar pero con un look exquisito y muy sofisticado, el cual sabe llevar con delicadeza y elegancia.

Ana de Armas es una de las actrices top del momento. Después de su interpretación de Marilyn Monroe en Blonde, sin duda fue una revelación y todos quieren tenerla en sus filmes. La famosa es de las más elegantes a la hora de vestir y tiene un gusto exquisito para las prendas. Esta vez lo volvió a confirmar.

Ana de Armas
Ana de Armas

Desde Grecia, ya despidiéndose de este increíble país lleno de cultura y vistas espectaculares, Ana de Armas posó con una excéntrica piscina detrás con una falda midi en blanca y un top sencillo con escote en V en negro. Esta pollera tiro alto le hace una figura increíble, la cual ya tiene, pero la resalta aún más.

Ana de Armas vistió minimalista y muy elegante
Ana de Armas vistió minimalista y muy elegante

Ana de Armas lució también una cartera negra bastante pequeña con detalles dorados al igual que la falda, que tiene un cinturón a juego con hebillas en ese color. La actriz sumó un peinado de media cola alta con su pelo suelto y con ondas al natural.

Ana de Armas disfrutó de Grecia
Ana de Armas disfrutó de Grecia

Ana de Armas siempre está sencilla, incluso con el maquillaje. Se puede observar apenas un tono amarronado en sus párpados, con algo de delineador y máscara de pestañas más labios rosados nude. Todo complementa muy bien y la hace ver sofisticada.

Ana de Armas disfrutó al máximo

Hay varias imágenes de ella desde Grecia, donde se la ve muy contenta de poder visitar este país. Posó con el atardecer, cenó comidas increíbles y se despidió de un lugar que, sin duda, va a querer visitar nuevamente en un futuro no muy lejano.