Se viene el nuevo Acueducto, pero faltará agua por una semana

Aguas Santafesinas anunció que desde este jueves y por 7 días, habrá merma de presión en diferentes sectores de Rafaela, por la puesta a punto del acueducto proveniente de Desvío Arijón.

Acueducto de Desvío Arijón con destino final a Rafaela
Acueducto de Desvío Arijón con destino final a Rafaela Foto: Prensa ASSA

Como parte de las tareas de puesta a punto del ingreso de agua potable a Rafaela proveniente del Acueducto Desvío Arijón, es necesario realizar tareas de ajuste impostergables. Por ese motivo, a partir de este jueves 6 de julio y por un plazo estimado de siete días, Aguas Santafesinas Sociedad Anónima anunció que se volverá al régimen anterior de servicio, por lo que en dicho lapso se registrarán mermas en las presiones que se han optimizado con el nuevo sistema de provisión.

Las tareas a efectuarse incluyen la reparación del acueducto en tres puntos distintos, además de trabajos de readecuación eléctrica en la estación de bombeo N° 5 ubicada en Angélica.

Cabe destacar que el ingreso de agua desde el Acueducto Desvió Arijón hizo posible contar con 6.000.000 más de litros de agua potable por día en la ciudad, lo que redundó en mejoras de las presiones en la red.

Aguas Santafesinas de entrada dejó en claro que todavía se está transitando un período de prueba y ajustes del complejo sistema, por lo que este tipo de modificaciones de régimen de servicio se darán hasta que se logre estabilizar el mismo.

Los trabajos están a cargo de la empresa contratista que tiene a su cargo la obra de ampliación del Acueducto.

La obra

La obra concretada en la actual gestión de gobierno provincial comprendió un nuevo módulo de potabilización que duplicó la capacidad de producción de la planta de Desvío Arijón.

Desde allí se tendió un acueducto de 140 kilómetros de extensión para abastecer a las diez nuevas localidades incorporadas al sistema en esta etapa.

También se erigieron cinco estaciones elevadoras, la principal de ellas en la planta de Desvío Arijón, que servirán también para futuras ampliaciones.

En cada una de las localidades se instalaron cisternas de almacenamiento para disponer el agua potable de las poblaciones abastecidas.

En Rafaela se construyó una nueva cisterna de cinco millones de litros de capacidad, vinculada a la ya existente en las instalaciones de Aguas Santafesinas.

De este modo, se completa el camino del agua desde el río Coronda hasta Rafaela.