Irá a juicio el acusado de herir gravemente a "Bunky", el perrito de Río Ceballos

Se trata de un empleado de la Cooperativa de Agua de la localidad serrana.

Bunky, antes de ser atacado.
Bunky, antes de ser atacado.

Pablo Daniel Corbalán está acusado de herir brutalmente al perrito "Bunky" en febrero de 2017 en la ciudad de Río Ceballos. Debido a la gravedad de las lesiones provocadas, el animal de seis años tuvo que ser sacrificado.

El perrito Bunky, malherido.
El perrito Bunky, malherido.

Corbalán es empleado de la Cooperativa de Agua de la localidad serrana, y fue enviado a juicio por su accionar por la jueza de primera instancia Anahí Cristina Hampartzounian.

Así, el vecino de Río Ceballos deberá enfrentar el banquillo de los acusados, ya que está imputado de daños y malos tratos y actos de crueldad con los animales.

La historia

Se cree que durante la noche del 15 de febrero y la madrugada del 16, Corbalán observó al perro "Bunky" en su casa, ubicada en calle Tucumán 610, de barrio María Cristina.

Según planteó el entonces fiscal del caso Carlos Matheu (ya jubilado), Corbalán tuvo intención de matar al animal "por el sólo espíritu de perversidad", atacándolo con un elemento filoso en la parte frontal del cráneo y en la zona dorso lumbar con compromiso de algunos órganos internos. Lesiones por las cuales el perro fue sacrificado.

"El cuadro era escalofriante. Había sido golpeado con un machete con filo en su cabeza y en su espalda. Un reguero de sangre llevó a los familiares del animalito hasta la casa del agresor, que presta servicio en la cooperativa de agua de Río Ceballos. Fue el autor bestial de una conducta porque su perra estaba en celo y 'Bunky' se había acercado a ella", indicó a La Voz del Interior el abogado Carlos Nayi, quien representa a la familia del perrito.

Por su parte, Corbalán aseguró que se enteró del caso por Facebook, porque había una foto de él y del perro acusándolo de matar al animal.

Bunky, antes de ser atacado.
Bunky, antes de ser atacado.

Leonardo Sebastián Escalante, dueño de "Bunky", aseguró que esa noche vio a su perro fuera de la casa con varias lesiones, y siguiendo los rastros de sangre que dejó el animal lo condujo hasta la casa de Corbalán.

A su vez, Escalante declaró que esa madrugada vio a su vecino que lavaba la vereda donde habían quedado las manchas de sangre.

Por orden judicial, el fiscal ordenó que se peritara la zona donde el dueño del perro había declarado haber visto manchas de sangre. Y, al igual que en crímenes humanos, se utilizó Luminol para detectar si en el lugar habían quedado rastros de sangre. El Estudio dio positivo.