El insólito negocio de una mujer: puso en alquiler el lado de la cama que no usa

Cada noche, Monique Jeremiah duerme con extraños en su habitación y gana cientos de dólares.

El insólito negocio de una mujer: puso en alquiler el lado de la cama que no usa
Todo sobre el "hot bedding".

La inusual historia de una mujer australiana se hizo viral en redes sociales por su extraño negocio. Se trata de Monique Jeremiah, de 36 años, que alquila el lado de la cama que no usa a personas desconocidas.

La práctica tiene un nombre y es conocida como “hot bedding”: consiste en rentar el espacio que no se usa de la cama a quien lo necesite. Según las palabras de la propia Monique, “es excelente para las personas que son capaces de desconectarse emocionalmente y dormir al lado de alguien más de forma respetuosa y sin ataduras”.

Monique trabaja como modelo, pero como es ocasional debió rebuscárselas para obtener más dinero y así pagar el alquiler y subsistir. Ella misma reveló que con el “hot bedding” gana más de 500 dólares al mes.

Según el medio británico Mirror, Jeremiah decidió comenzar a alquilar su colchón para generar más ingresos económicos tras haberse separado de su novio con el que convivió durante dos años. Ella lo ve como una oportunidad “perfecta”, ya que se considera sapiosexual y no le llama la atención el aspecto físico de las personas.

Todo sobre el "hot bedding".
Todo sobre el "hot bedding".

Todo sobre el “hot bedding”

Analizando el mercado actual, Monique señaló que el término es el “futuro para los propietarios”: “Todos pueden practicarlo, solo tienen que tener respeto por quien está del otro lado de la cama”.

Después de separarse, y en medio de la pandemia de 2020 por coronavirus, ella se las rebuscó, aprendió sobre el “hot bedding” y lo puso en práctica casi de inmediato, sin pensar mucho.

Todo sobre el "hot bedding".
Todo sobre el "hot bedding".

“Mi primer cliente fue alguien que conocía”, argumentó Monique, y cerró: “Sabía que mi única opción era innovar y pensar fuera de lo común, y así fue como decidí hacer ropa de cama caliente. Mi habitación tiene el tamaño de una suite de hotel de cinco estrellas”.