Eran aproximadamente las once de la noche en Dartford, Inglaterra, y la familia Showell ya se había ido a acostar. Todo parecía tranquilo, hasta que un hecho inesperado hizo reaccionar al perro de la familia.
La pequeña Chloe Showell, de un año de edad, estaba durmiendo en su habitación cuando comenzó a sufrir regurgitaciones y a ahogarse con su vómito. El sonido alertó a Louie, la mascota de la casa, que rápidamente comenzó a ladrar y a correr por todo el piso superior de la casa hasta que los papás de la nena se despertaron.
Primero, Shannon Weeks, la mamá de la niña, pensó que había pasado algún animal por la puerta de la casa pero, al ver que Louie no se detenía sospechó que algo no andaba bien.
"Él realmente la salvó. Louie es mi héroe. Si no fuera por él, no tendría conmigo a mi hermosa hija", dijo orgullosa la mujer al Daily Mail.
Cuando Shannon entró a la habitación de Chloe la vio boca abajo, estaba pálida y tenía los labios azules. La levantó, le dio unas palmadas en la espalda y, poco a poco, comenzó a mejorar.
Después del incidente, los padres la llevaron al hospital y le diagnosticaron que tenía bronquitis y que, si no fuese porque intervinieron rápido, Chloe podría haber muerto.
Afortunadamente, la niña ya está recuperada y disfruta jugando con su amigo más fiel al que ahora también puede llamar héroe.