Con la llegada del verano, el calor, la pileta o el mar, algunas personas no saben que al ingresar a estas superficies puede llegar a traer problemas para los oídos. ¿Por qué? Se debe a que el líquido que puede depositarse en los oídos, algunas veces puede causar enfermedades.
El agua que entra a los oídos una vez que la persona se sumerge en la pileta, mar o río, puede generar otitis externa o interna, por lo que es recomendable destaparlos luego de entrar al mar.
Ante esto, te recomendamos cuatro trucos por si esto te ocurre y para que cuides de tu salud y los que te rodean:
1- Agua y sal. Colocar una cucharada de sal (5 g) en una taza que contenga unos 125 ml de agua y revolver hasta que quede bien disuelta. Humedecer un trozo de algodón con la mezcla y dejar caer algunas gotas del líquido en el oído. Mantener la cabeza inclinada durante unos 3 minutos para que el agua llegue al interior. Después realizar el movimiento inverso para que drene y limpiar la parte exterior para remover la cera blanda.
2-Gotas de agua oxigenada. Poner en un recipiente -como una taza o un vaso- agua tibia y agua oxigenada (utilizar peróxido de hidrógeno al 3% o menos) en partes iguales. Después, con un gotero llenar el oído afectado y dejar actuar por un período de 3 a 5 minutos, después inclinar la cabeza para sacar el líquido y enjuagar el oído con agua tibia.
3-Té de manzanilla. Mojar un algodón en una infusión de manzanilla , luego echar 3 gotas adentro del oído y dejar el liquido allí unos 20 minutos con la cabeza inclinada. Finalmente, incorporarse, de esta forma se ablandará la zona.
4-Gotas óticas. El objetivo es que la zona se ablande como para que posteriormente el otorrinolaringólogo lo termine de extraer a través de la otoaspiracion, un procedimiento sencillo que se realiza en consultorio, en el que se extrae la cera del conducto auditivo externo mediante aspiración y bajo visión microscópica. Sin embargo, si el cerumen es leve, puede deshacerse con la sola aplicación de la sustancia otológica. Deben echarse 4 o 5 gotas, 4 veces al día. Se aconseja, no colocarse ningún algodón ni utilizar hisopos en el oído.