Luego de haber levantado polémicas por sus dichos contra los pintores que contrató, Viviana Sacconne volvió a sus redes sociales, pero esta vez, para hacer una grave denuncia por una estafa por parte de un constructor.
La actriz contó que los pintores le había avisa que no iba a trabajar a su casa porque no se quería mojar, a lo que la artista acotó: “La cultura del trabajo”.
En medio de sus dicho, varios usuarios la criticaron, y ella tuvo que aclarar que la explicación y publicación la hizo en tono de “humor.” Sin embargo, en las últimas horas volvió a recurrir a la red social del pajarito para contar la estafa de la que fue protagonista.
El descargo de Viviana Sacconne en Twitter
En un extenso hilo, la actriz contó que fue estafada por un albañil que le destrozó la casa, luego de haber invertido dos mil dólares.
La actriz empezó contando que el año pasado vendió su casa y se compró otra que necesitaba refacciones porque “era bastante vieja”. “No contaba con mucho dinero, más bien, poco, así que alguien me recomendó un constructor que había trabajado por 30 años con su familia”, empezó relatando.
Explicó que el hombre en cuestión, al que llamó “F”, fue a ver la casa, acordaron un presupuesto y firmaron un contrato por que el el trabajo duraría 60 días de trabajo de corrido y “con el material grueso incluido” y que ella se haría cargo de todo lo demás. La obra empezó a medidos de septiembre de 2021.
Saccone quedó maravillada con el trabajo del hombre ya que le generaba confianza. Para empezar, F le pidió pisos “de primera” porque no trabajaba de segunda mano, tampoco trabaja durlock y tampoco microcentro o alisado, por lo que la actriz decidió hacer una gran inversión a puro esfuerzo.
Pero en un momento comenzaron los problemas. “Fueron pasando los días y la obra iba lenta. ´Así es al principio´ me decía F. Y yo confiaba”, relató la protagonista de Sex. En diciembre, Saccone “lo empezó a apurar” porque tenía que dejar el departamento donde esta alquilando.
Después le surgió un trabajo en Córdoba y partió para allá, pero pasado más meses, en febrero no tenía respuestas de cómo iba la obra.
Desesperada, llamó a la persona que lo había recomendado: “No pudo creer el estado en que estaba mi casa, solo solo la obra, sino, mis muebles dentro. Intentó hacerse cargo a último momento, de salvar la situación y F solo podía decir que no sabía qué había pasado”.
“Llamo a la persona que me lo había recomendado y NO PUDO CREER el estado en el que estaba, no solo la obra, sino, mis muebles dentro de la casa. Intentó hacerse cargo a último momento, de salvar la situación y F solo podía decir, que no sabía que había pasado”, señaló indignada.
Sobre el final del relato, la actriz se lamentó porque reconoció que llamó a un abogado pero como el albañil “no tiene nada a su nombre” le recomendó que no lo someta a juicio.
“Llego a mi casa y vi que había pagado para que la destruyeran. Estaba peor de como la había comprado”, dijo.