El viceministro de Economía no descartó que haya más turbulencias tras las elecciones: “No tengo la bola de cristal”

Gabriel Rubinstein admitió que la inflación de septiembre será “muy alta” y que puede superar otra vez los dos dígitos.

Gabriel Rubinstein
Gabriel Rubinstein Foto: Twitter

El secretario de Política Económica, Gabriel Rubinstein, no descartó que el día después de las elecciones generales se refloten las tensiones sobre el dólar blue y los financieros, según sea el resultado. “El resultado de las PASO fue un shock para el mercado por el triunfo de Milei. El 23 se verá si el resultado afecta o no la decisión política. No tengo la bola de cristal, no descarto nada”.

En ese sentido, reafirmó que el dólar oficial quedará anclado a $350 hasta el 15 de noviembre par luego realizar un leve crawling peg (devaluación por goteo) hasta ver qué decisión “toma el próximo gobierno”.

Por otra parte, el funcionario justificó la decisión acerca del informe de inflación semanal que publicarán todos los viernes, tras el dato del IPC de agosto que fue del 12,4%, el peor en tres décadas.

La primera edición arrojó alza de 2,1% en la semana del 4 al 10 de septiembre y concluyó que hubo una desaceleración de precios. Estas mediciones no reemplazan al dato oficial de inflación que difunde el INDEC de manera mensual.

En esa línea, Rubinstein indicó que “es una manera de seguir más de cerca la evolución de los precios. Queremos mantener nuestro propio seguimiento” y que estas estimaciones no reemplazan al INDEC.

El viceministro de Economía afirmó que “en septiembrela inflación será alta. Esto se da frente a los efectos generales de la devaluación que va a generar un pico de precios altos” en los próximos meses.

No podemos descartar también que sea de dos dígitos; puede ser 9 y pico, 10 u 11%, pero creemos que va a ser muy alta porque las inflaciones muy altas de las últimas semanas de agosto, por ejemplo la semana que terminó el 20 de agosto estimamos que la inflación fue del 4,8%, la que terminó el 27, estimamos que aumentó 3,8%”, sostuvo Rubinstein.

Para el funcionario, hasta antes del dato de agosto, no tenían “la necesidad de difundir” este tipo de informe semanal de estimaciones y remarcó: “Lo único que interesa es que la inflación se pueda bajar”.

Rubinstein fue consultado acerca de Javier Milei, quien dijo que podrá contener la inflación en dos años si dolariza la economía. Pero, para el secretario, si Massa es presidente, “controlará la inflación en menos tiempo” y consideró indispensable que el país avance hacia el “superávit fiscal”.

En la situación económica actual, “la única opción que nos queda en Argentina, al no tener reservas, es no tener déficit”.

Por otra parte, señaló: “La brecha cambiaria es muy dañina y afecta a la inflaciónTenemos que solucionarlo. Para que baje un 30%, deberíamos tener una masa de dólares. En ese sentido, indicó que no se necesita US$60.000 millones que plantea Milei para dolarizar, porque “es una fantasía”.

Por su parte, habló que se presentó el Presupuesto 2024 que busca “un superávit fiscal de 1% del PBI”. Para el viceministro, “en el corazón del debate del Presupuesto 2024 debe estar la nueva conformación parlamentaria”.