El Ministerio de Salud provincial suspendió las cirugías programadas en la ciudad de Santa Fe. La decisión forma parte del plan de contingencia frente al aumento de la demanda de camas en medio de la tercera ola de la pandemia de coronavirus.
Fuentes oficiales precisaron que la ciudad capital vivió un fin de semana complicado en el que tanto el Hospital Cullen como el Iturraspe tuvieron el 90 % de las plazas ocupadas. En ese lapso también constataron un aumento en la positividad de los test de COVID-19.
La subsecretaria de Equidad en Salud, Romina Carrizo, aclaró que la demanda de internaciones en el resto de la provincia es baja, a diferencia de lo que ocurrió en los últimos días en Santa Fe. Por eso resolvieron evaluar la ampliación de los nosocomios de segundo nivel para garantizar la atención a pacientes con coronavirus y también con otras patologías.
En esta primera fase del plan de contingencia, la cartera sanitaria reforzó las instalaciones del Cemafe, los dos Iturraspe y el Cullen. No obstante, por el momento descartaron volver a montar el hospital de campaña que se utilizó en las primeras olas de la pandemia.
“Creemos que con estas medidas vamos a dar respuestas”, afirmó el director provincial de Tercer Nivel de Salud, Rodrigo Mediavilla. Así planteó que la suspensión de cirugías programadas debería bastar para evitar el colapso en Santa Fe.