Quizá el término cut crease todavía no suene mucho, pero se puede decir que se trata de darle una vuelta a la sombra de ojos tradicional.
Si hay una técnica para aplicar la sombra de ojos que domine sobre las demás, esa es sin duda la smokey eye o ahumada. Lo que podríamos resumir en difuminar. Sin embargo, la clave para un buen ahumado es diluir el color del párpado hacia arriba, de forma que no se note un corte brusco desde éste hacia el párpado fijo y se vaya perdiendo poco a poco el tono.
Con esta técnica de tendencia debemos hacer todo lo contrario, señalar bien la zona en la que termina el párpado móvil y empieza el fijo. Así lo explica Gato, maquillador de Maybelline: "se centra en marcar 'drásticamente' el pliegue del ojo para definirlo de modo extremo, incluso creando un nuevo pliegue imaginario en caso de ser un ojo de párpado caído, oriental o muy pesado. Un efecto añadido que se consigue al aumentar el espacio entre el ojo y el pliegue es que el primero gana en luminosidad y apertura".
El make up artist explica que existen varias formas de realizarlo, aunque hay dos que triunfan entre las demás: "definiendo el pliegue con un tono oscuro de sombra y difuminando a partir de ahí hacia la ceja, o dejando una fina línea sin maquillar entre el párpado fijo y el párpado móvil, siempre y cuando ambos párpados estén maquillados en un tono más oscuro que el de la piel y la línea sin maquillar destaque en claro". Aunque estas son las técnicas más habituales, Gato nos confirma que "siempre y cuando la definición del pliegue esté muy marcada y hayamos modificado ligeramente su forma, será un cut crease. También podríamos marcar simplemente el pliegue de mitad del ojo hacia afuera y seguir siendo este efecto, si el trazo está ultra definido".
En cuanto a las tonalidades en las que podemos realizarla, el make up artist nos da bastante libertad: "al ser un maquillaje 'de corrección' muy extremo, permite cualquier tono de sombras, aunque los tonos tierras siempre van a tener resultados más creíbles si lo que queremos es modificar la línea natural del pliegue".
Sin embargo, Gato señala que lo que más debemos tener en cuenta es el tipo de párpardo del que estamos partiendo, ya que dependiendo de éste tendremos que realizarla de una forma o de otra y el efecto será más o menos satisfactorio: "cuando tienes un párpado firme y despejado, el resultado es muy espectacular ya que la definición que se consigue es muy marcada. Y en el caso contrario, cuando el párpado es muy pesado o caído, si el cut crease está 'conseguido', va a crear ópticamente que tenemos el párpado perfectamente definido, el ojo más abierto y despejado. Son los párpados intermedios, o con poco espacio entre el pliegue y la ceja los que menos se benefician de esta técnica" Sobre el tipo de sombra de ojos que debemos emplear, Gato también tiene sus consejos para un acabado más profesional: "una sombra en crema en tono piel clara en el párpado móvil ayudará a crear la separación perfecta entre pliegue y párpados. También se puede hacer un molde: una elipse de extremos afilados para apoyarla sobre el párpado móvil y empezar a aplicar las sombras oscuras sobre el párpado fijo. De este modo, al separar el molde, el pliegue se habrá definido perfectamente".
Paso a paso: 1º Un toque de corrector sobre la totalidad del párpado para comenzar sobre una superficie homogénea de color.
2º Usar un papel adhesivo y crear media elipse o arco del tamaño de tu párpado con el ángulo que busques para tu pliegue.
3º Maquillar el párpado móvil con sombras intensas al ras del adhesivo y difuminar a gusto hacia las cejas. Usar sombras mates, el brillo déjalo para puntos concretos.
4º Retirar el adhesivo y aplicar un toque de sombra en crema clara sobre el párpado móvil con un pincel plano de pelo firme.
5º Añadir toques de luz al centro del párpado y lagrimal y trazar un khol al ras de las pestañas.