Desde hace ya 73 años, La Tomatina se celebra cada último miércoles de agosto en esta localidad valenciana. Su origen data de 1945, cuando un grupo de jóvenes acudió a la Plaza del Pueblo con el objetivo de ver el desfile de gigantes y cabezudos que allí se celebraba. El problema fue que al hacerse paso entre la gente, hicieron caer a uno de los participantes, quien, preso de la ira, comenzó a golpear todo lo que estaba a su paso.
Justo allí había un puesto de verduras y la gente comenzó a tirarse tomates unos a otros. El altercado resultó tan divertido que, al año siguiente, los jóvenes volvieron a hacer lo mismo (pero esta vez a propósito) y llevaron los tomates de sus casas.
Luego de varios años de prohibición por temas políticos, La Tomatina se permitió y se instauró como fiesta oficial de Buñol.
Este año, convocó a más de 20.000 personas, que se arrojaron unos a otros 145.000 kilos de tomate. Para evitar disturbios se pusieron a disposición más de 500 efectivos, entre guardias civiles, policías locales y nacionales, protección civil y Cruz Roja.
La novedad de este año es que se sumaron "puntos violetas" en homenaje a las mujeres asesinadas en manos de sus parejas o exparejas que brindan asesoramiento a las personas contra la violencia de género y el acoso sexual.
"¡Gracias por vivir con nosotros esta increíble experiencia! ¡La lucha del tomate ha llegado a su final! ¿Estás listo para la próxima pelea en 2019?", preguntaban desde la página oficial del evento.
Si sufrís violencia de género podés comunicarte de forma gratuita y anónima al 144.