El bullying que sufrió Sophia Hadjipanteli no condicionó su carrera como modelo. Por el contrario, la motivó a combatir los estereotipos de belleza y se volvió un ícono del "movimiento uniceja".
La joven de 21 años nació en Chipre pero se crió en Estados Unidos, donde era criticada porque su familia no hablaba bien inglés y se vestía de forma diferente. El proceso de aceptación de su cuerpo comenzó cuando tenía 15 años y tiñó por error sus cejas de negro.
En ese momento, la modelo rubia tomó la decisión de no corregir su error, sino aceptar su nuevo aspecto para desafiar los cánones de belleza.
"Mi uniceja negro azabache me hace sentir tan hermosa, muestra mi fuerza", expresó Sophia durante la Semana de la Moda de Londres, Inglaterra, donde causó furor por su determinación.
A pesar de que en sus redes sociales recibe críticas cada día, la modelo y fundadora de "#UnibrowMovement", que en español es "Movimiento Unicejas", asegura que nunca va a cambiar el aspecto de sus cejas.
"La gente dice que tener pelo en la cara es repugnante, pero ¿por qué es así? Probablemente ellos nunca me verán en su vida. Yo quiero servir de inspiración para que la gente vea que lo diferente no tiene porque ser feo", comentó durante una entrevista que compartió en su Instagram.
Recientemente, la joven posó para una producción de fotos vestida como Frida Kahlo, con quien la comparan recurrentemente. "Siempre me ha gustado y pienso que era alguien muy bella", aseguró.