Las tareas de limpieza del hogar llevan dedicación, paciencia y los elementos necesarios para eliminar los rastros de polvo y suciedad. No obstante, muchas veces los trucos caseros son los que ayudan a quitar el problema y resolver rápido sin gastar de más.
En la web hay trucos para resolver todo tipo de problema casero, desde recetas, soluciones de cañería, decoración y cocina. No hay dudas de que las manchas de humedad, en los azulejos o los pisos, son un dolor de cabeza a la hora eliminarlas.

Hay elementos de cocina que se mezclan y forman una fórmula efectiva que es un aliado a la hora de limpiar. En este caso, el vinagre y la maicena son la preparación exacta para ser un potente limpiador y dejar las superficies como nuevas.
El vinagre tiene funciones de desinfectante y desengrasante. Por otro lado, la maicena ayuda a remover las manchas difíciles y le da una textura suave sin dañar las superficies.
Esta mezcla sirve para limpiar vidrios, espejos y superficies que tiene acero inoxidable como las de las cocinas. Otro tip es que son ideales para quitar manchas de la ropa y dejar impecables los pisos de cerámica o porcelanato.
Cómo preparar la mezcla de vinagre y maicena: para qué sirve
Para eso hay que mezclar una taza de vinagre blanco con una cucharada de maicena y un poco de agua tibia. Luego agitar o mezclar hasta que se disuelva por completo la preparación.

Una vez que está es recomendable pasar el líquido a un pulverizador para que sea más fácil aplicar.
Se puede aplicar a espejos, vidrios, azulejos de cocina o baño y a manchas en la ropa sin preocuparse por dañar la tela.
Es una fórmula eficiente para eliminar bacterias y gérmenes, elimina malos olores dejando totalmente reluciente las superficies donde se aplica.