En diciembre del año pasado, Silvina Luna publicó su primer libro que lleva por nombre “Simple y consciente”. Este escrito narra su vida y los momentos más complicados que la modelo ha vivido a raíz de los problemas de salud, además de contar en primera mano sus sentimientos ante los diagnósticos médicos.
El libro salió a la venta el 1 de diciembre del año pasado y fue abordado en diferentes programas de televisión desde su estreno, especialmente por las desgarradoras reflexiones que Luna hizo en él.
Qué dice el libro de Silvina Luna
“La mujer que vas a descubrir en este libro no es solamente la que crees conocer, sino la heroína de carne y hueso que atravesó experiencias fuertes que algunas veces la derribaron pero siempre se levantó”, expresa Silvina Luna en sus propias palabras.
Luego da el inicio a la reflexión que poco a poco irá desglosando: “También vas a encontrar a alguien que alguna vez creyó que mejorando la imagen que le devolvía el espejo podría encontrarse”.
“En este libro repaso mi pasado, cuento acontecimientos de mi vida que me marcaron, con los que seguro se van a sentir identificad@s. Ciertas decisiones y acciones tuvieron sus consecuencias, al punto de perder mi salud”, sentencia.
Así habrían comenzado los problemas de salud de Silvina Luna
Silvina Luna hoy se encuentra internada en el Hospital Italiano, con altibajos en su salud y necesitando de asistencia respiratoria. La actriz lucha contra una bacteria, sigue a la espera de un trasplante de riñón y llevaba un tiempo realizándose diálisis. Todo este cuadro médico habría derivado de aquel “retoque estético” por el que Silvina Luna pasó de la mano de Anibal Lotocki, quien le habría colocado en sus glúteos una sustancia llamada metacrilato.
“El día que me dieron el diagnóstico, subí a mi auto, en ese momento vivía en México, y todavía no puedo recordar qué pasó en esas dos horas después de que salí de la clínica”, expresa Silvina en su libro, fragmento que leyeron en LAM.
Lo que pasó después del metacrilato
Silvina Luna buscó ayuda profesional en manos de profesionales de la salud, quienes pudieran no solo darle una solución, sino poner fin a los dolores que venían atormentándola.
“El primer médico que me trató me preguntó qué era lo que más me gustaba en la vida y le contesté que la playa y el mar, y me dijo ‘Bueno, andá a disfrutarlo’”, confesó Luna, señalan que ese médico había puesto en tela de juicio su expectativa de vida por su delicado estado de salud.
“Fui a cirugía, pero siempre se mantenía el pronóstico de que me quedaban pocos meses de vida. Creí eso y seguí creyéndolo. Creo que me queda un número ‘x’ de meses y así vivo”, expresó en uno de los fragmentos más desgarradores de su libro.
Tanto en Socios del Espectáculo como en Intrusos también leyeron y mostraron partes del libro de Silvina Luna, donde se destaca una fuerte reflexión que la modelo hizo: “Hoy me pongo a pensar en mi relación con el medio: siempre sentí algo hostil, pero sin duda era una percepción mía, porque me fui muchas veces y a la vuelta siempre me ofrecieron trabajo. Es que la inseguridad es algo interno”, se mostró arrepentida de su decisión. “Fue una mala decisión y me ocasionó muchas dificultades que todavía sigo enfrentando”.