Gustavo Conti aseguró que recibe señales de Silvina Luna tras su muerte: “Lo asocié todo”

El ex Gran Hermano relató una serie de acontecimientos que experimentó tras la muerte de su amiga.

Gustavo Conti aseguró que recibe señales de Silvina Luna tras su muerte: “Lo asocié todo”
Gustavo Conti y Silvina Luna

Tras la muerte de Silvina Luna, su gran amigo y compañero en el reality que los lanzó a la fama, Gustavo Conti, hizo una fuerte revelación que dejó a todos boquiabiertos en una entrevista.

En diálogo con el programa Cortá por Lozano, el exparticipante de Gran Hermano relató cómo, a solamente dos semanas de la muerte de la modelo rosarina, recibe “señales” de su parte.

Silvina Luna, Ximena Capristo y Gustavo Conti (Foto: web)
Silvina Luna, Ximena Capristo y Gustavo Conti (Foto: web)

Estremecedor relato de Gustavo Conti

“Subí a la camioneta y había un papelito enroscado tirado en el asiento”, comenzó relatando el actor. “Estuve a punto de tirarlo, pero no lo hice y estuvo como una semana ahí. Cuando viene la Negra (Ximena Capristo, su pareja), le dije ‘ese papel es tuyo’. Y era un papelito que le habían dado a Ximena de lo que hacía ella, de Reiki y eso. No sé cómo apareció eso en mi camioneta. Era como una tarjetita y no entiendo cómo llegó”, explicó sorprendido.

Pero eso no fue todo: Conti compartió en el ciclo de Telefe sobre otra escena que lo acercaría con su amiga. “Después tuve otra más que fue tremenda, pero es difícil de explicarlo... Escuchando música me apareció un tema muy viejo que habla de... lo asocié todo. Nada, locura mía... Aparte raro con el contexto cómo fue todo...”, expresó.

“No sé, tal vez que uno quiere que pasen esas cosas, ¿no?”, cerró.

La última charla con Silvina Luna

“Le dije que íbamos a comer un asado en casa”, arrancó el actor en la misma entrevista en referencia a la internación de la modelo. “¡Y se cag... de risa! Me dijo: ‘invitalo a comer a Ezequiel (su hermano) también´”, agregó enseguida.

Sobre su decisión de no visitarla durante su estadía en el Hospital Italiano, Gustavo se confesó: “¿A qué iba a ir? Fui, la vi, sabían que estaba a disposición… Estaba el grupo de amigos interno que estaban a sol y sombra, que era necesario por una cuestión de salud para el hermano”.