El musical de El Principito regresó a Calle Corrientes: así se prepararon sus protagonistas

Juan Carlos Baglietto volvió a apostar por esta exitosa obra teatral y su nueva versión llegó al Teatro Ópera con un gran elenco.

El musical de El Principito regresó a Calle Corrientes: así se prepararon sus protagonistas
El musical de El Principito regresó a Calle Corrientes: así se prepararon sus protagonistas Foto: Instagram

La Calle Corrientes recibe nuevamente a El Principito. Así como hace más de 20 años, el musical inspirado en la popular novela de Antoine de Saint-Exupéry regresa de la mano de Juan Carlos Baglietto. Junto a sus hijos, Julián y Joaquín, el legendario músico vuelve con este proyecto, esta vez interpretando a El Aviador.

“Ojalá ese éxito se repita”, comentó Juan Carlos Baglietto recordando el proyecto de hace dos décadas ante la prensa invitada a una función especial de El Principito, días antes del estreno en el Teatro Ópera de Buenos Aires. Esta vez, por una iniciativa propia del músico (que quería volver a actuar y al mismo tiempo compartir este proyecto con sus hijos) se gestó una nueva versión del musical.

Llega el musical de El Principito con Juan Carlos Baglietto, Walas de Massacre, Flor Otero y más
Llega el musical de El Principito con Juan Carlos Baglietto, Walas de Massacre, Flor Otero y más Foto: Prensa

“Para nosotros es una gran ilusión poder volver a hacer esta obra, sobre todo en tiempos donde hace falta abrir el corazón, creer un poco más en las cosas que uno no puede tocar, donde nos hace falta un poco de cariño, una mano en el hombro para seguir adelante”, señaló el artista rosarino. “Creemos que esta obra, a través de la emoción que transmite, permite conectarnos con lo mejor de nosotros”, agregó ante la prensa.

Este proyecto, ahora familiar, propone una versión del clásico con varios guiños modernos, tanto en lo musical como en lo performático. Por ejemplo, Walas, el líder de Massacre, se pone en la piel del personaje de El Rey, siendo su primera incursión en un musical de teatro. Mientras que Zaina, el freestyler surgido de las batallas de gallos, interpreta a El Vanidoso mientras que aporta una canción de su autoría al repertorio de la obra, en un trabajo conjunto con Julián Baglietto.

Esta nueva versión de El Principito está a cargo de Eduardo Gondell, quien también dirigió el musical 20 años atrás. “El momento no tiene nada que ver con el arte”, aseguró en la rueda de prensa al ser consultado por la difícil situación económica y social en la que decidieron lanzar este proyecto. Por su parte, el director recordó que la anterior obra también fue lanzada en plena crisis, allá por el 2001. “No puedo decir que no nos importa el resultado, pero me parece que lo más interesante es el viaje que estamos haciendo”, sostuvo.

Vía País pudo conversar mano a mano con algunos de los protagonistas: Luis Rodriguez Echeverría (El Principito), Valentina Podio (La Flor), Zaina (El Vanidoso) y Walas (El Rey), quienes revelaron cómo se prepararon para este proyecto tan especial.

— ¿Cómo te llegó el proyecto?

Luis: Fui al casting abierto de Rent, la obra de Fer Dente, y aproveché la oportunidad porque nunca lo había hecho, de ir a un casting de una obra tan importante, en Calle Corrientes y todo. Fui con muy pocas expectativas, pero a través del proceso avancé mucho y eso hizo que me viera Stella (productora ejecutiva) y cuando apareció la oportunidad de hacer El Principito lo estaban buscando y ella se acordó de mí. Me llamaron y el resto es historia.

Zaina: Llegó a mi sello, básicamente estaban buscando a un personaje que pueda cumplir ciertos requisitos de edad y cosas así. No hice audición, a Edu (el director) le gustó mi perfil, nos juntamos a tomar un café, me contó cómo iba a ser la obra, yo le dije lo que podía aportar y fue una conversación muy buena. Fue muy natural.

El musical de El Principito regresó a Calle Corrientes: así se prepararon sus protagonistas
El musical de El Principito regresó a Calle Corrientes: así se prepararon sus protagonistas Foto: Instagram

Valentina: Yo trabajé antes con Eduardo Gondell, Eduardo Frigerio y Germán Crivos, que están en la parte de dirección, en una serie de Disney y en La Ternura, un proyecto del San Martín. Me contaron que estaban audicionando, haciendo un casting para El Principito, y obviamente dije ‘hagámoslo, por favor sí’. Me llamaron para una audición, fui pasando unas instancias y finalmente quedé.

Walas: Me llegó con sorpresa y con mucha alegría, que me convoquen para algo por fuera de lo que hago yo. Me gustó la propuesta, que sea una comedia musical. Toda mi vida quise hacer un musical o una ópera rock tocada en vivo. Por supuesto me gustó la obra y la canción que me toca a mí, que es tipo Tim Burton, bastante oscura, así que dije que sí enseguida.

— ¿En qué te inspiraste para interpretar a tu personaje?

Luis: El Principito me saca mi parte más ingenua, inocente. Yo lo encaro mucho desde el niño interior, porque más allá de ya tengo 23 años, tengo un niño propio y es un niño que busco tener al descubierto y al total juego. Y curiosidad… para poder llevar esa esencia, que es de El Principito, al resto del elenco. Esa sería mi primordial inspiración. Y además El Principito del libro. Leerlo una y otra vez, y conectar con lo que dice. Porque es un niño pero es re sabio. Tiene una conexión con algo que no se sabe que es pero de repente dice algo que es mucho más sabio que muchos de los adultos de la historia.

El musical de El Principito regresó a Calle Corrientes: así se prepararon sus protagonistas
El musical de El Principito regresó a Calle Corrientes: así se prepararon sus protagonistas Foto: Instagram

Valentina: La rosa me inspira mucho. Es una mezcla entre la inocencia y el ego. Ella es una niña que tiene un ego, que tiene algo por demostrar. Ella siente que tiene mucho para dar. También es muy demandante con El Principito. Me inspira un poco eso, ella es como una diva pero en una niña.

Zaina: Lo que tiene mi personaje es que es muy distinto a mí, entonces creo que me inspiré en todo lo que no me gusta. De la nada yo tengo que ser el vanidoso, la vanidad, la arrogancia, el hombre que ostenta que tiene plata, que lo siguen, y yo generalmente en mi carrera de freestyler siempre fui de un perfil muy bajo (me subo a un escenario, rapeo y me voy a mi casa a jugar a la compu) y acá de la nada puedo parodiar ciertas cosas que no me gustan y, quizás, hasta sacar algo bueno de algo malo como es la vanidad y lo arrogante.

Walas: Un poco los villanos de Disney, un actor que admiro que se llama Alejandro Urdapilleta y después bueno los tiranos, Mussolini, los de siempre… Trato de sacar inspiración de ese tipo de caracteres.

— El Principito tiene una famosa frase que es “lo esencial es invisible a los ojos”. ¿Qué es lo esencial en tu vida cotidiana?

Zaina: Yo como rapero lo que busco siempre es conocer al otro, porque siento que todo lo que me cuenta es experiencia que me sirve para mí, para usar después. Siento que de cada persona, aunque parezca que no, se puede aprender algo, o te podés poner en el lugar del otro. Entonces, eso. Me parece que es una frase que representa lo que hay que hacer para mejorar uno mismo, que es darle la oportunidad al otro de que te ayude a mejorar.

Valentina: Para mí lo esencial es la conexión con uno y con los demás. La conexión espiritual y los vínculos. El amor… me parece que la obra transmite muchísimo eso, y que El Principito va conociendo un montón de cosas, y al final se da cuenta que lo esencial estaba en sus relaciones y en el ser responsable con el otro.

El musical de El Principito regresó a Calle Corrientes: así se prepararon sus protagonistas
El musical de El Principito regresó a Calle Corrientes: así se prepararon sus protagonistas Foto: Instagram

Walas: Lo esencial es eso que no se puede ni comprar, ni definir. Eso es lo invisible, lo esencial, lo importante.

Luis: Lo esencial para mí es el arte, tener arte, poder compartirlo, la amistad, la familia, amarse a uno mismo. Me parece esencial conectar con uno y permitirse ser uno con otros. Para mí es esencial escuchar música, comer rico, ver el amanecer y el atardecer, y me parece esencial vivir sin muchos prejuicios.