Las compras masivas de turistas en Argentina equivalen a toda una provincia

El volumen de ventas que se genera por la demanda de extranjeros ya es comparable con el consumo de un distrito argentina. Estas operaciones benefician a los comerciantes de las ciudades limítrofes e impulsa la recaudación provincial.

Tour de compras de chilenos por mercados de Mendoza

Tras la devaluación constante del peso Argentino, frente al Dólar, se genera una importante inflación lo que se transforma en oportunidades de compras para los transandinos. 
Un supermercado  mayorista esta mañana mostraba cientos de chilenos comprando

Foto: Orlando Pelichotti
Tour de compras de chilenos por mercados de Mendoza Tras la devaluación constante del peso Argentino, frente al Dólar, se genera una importante inflación lo que se transforma en oportunidades de compras para los transandinos. Un supermercado mayorista esta mañana mostraba cientos de chilenos comprando Foto: Orlando Pelichotti Foto: Orlando Pelichotti

Impulsados por el valor del dólar, que les resulta favorable, miles de ciudadanos de países limítrofes cruzan diariamente la frontera con Argentina para conseguir productos más baratos que en sus países. Esta oleada de compradores, que se viene notando en distintas provincias del país, como Misiones, Entre Ríos, Mendoza, Rio Negro y Neuquén, conforman los que muchos analistas llaman la “provincia 25″, debido al volumen de operaciones y transacciones que generan.

Los “tours de compras” apuntan a productos de consumo masivo, no así a mercadería de consumo durable, señalaron desde el Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL). Entre los productos más demandados se encuentran alimentos no perecederos y productos de limpieza e higiene personal, entre otros.

Esta práctica, que ya es habitual ver en varias ciudades del país, es alentada por el tipo de cambio. Los visitantes traen dólares que cambian por pesos en el mercado paralelo y, esta manera, consiguen artículos a un tercio del precio que deberían pagar en sus países de origen.

Este fenómeno se profundiza debido a tres cuestiones particulares de la Argentina:

  • La vigencia del programa de Precios Justos, que establece una canasta de productos a valores más baratos y congelados por un determinado período de tiempo.
  • En el país hay productos de consumo masivo que se importan al tipo de cambio oficial, más bajo que el dólar blue.
  • Los combustibles, que en la Argentina cuentan con precios regulados, tienen un valor muy inferior al que se paga en otros países.

El IERAL -sobre la base de un informe de la consultora Nielsen- destaca que las ventas de productos de consumo masivo registraron en 2022 un incremento de 4,6% para el promedio del país, pero con un ritmo muy superior en localidades limítrofes: como Clorinda, con un 33%; Puerto Iguazú, con el 120%; Posadas, con un 16%; y Gualeguaychú, con un 27%.

En un primer momento, las pequeñas ciudades limítrofes se beneficiaban con la llegada de compradores extranjeros. Sin embargo, en los últimos meses las grandes urbes se incorporaron a esta nueva práctica.

Las economías de las provincias limítrofes ven el impacto de esta tendencia en sus cuentas públicas. “La variación en términos reales de la recaudación de Ingresos Brutos de una provincia como Buenos Aires fue de sólo el 3%, entre enero-abril de 2021 e igual período de 2023, mientras que ese guarismo fue de nada menos que el 28 % en Jujuy, el 12 % en Formosa, el 10 % en Chaco y el 9 % en Salta y Mendoza”, señala el informe de la consultora IERAL.

Esto también se ve reflejado en las ventas en estaciones de servicio. “Entre enero-marzo de 2021 e igual período de 2023, las ventas de combustibles se incrementaron un 9% en el promedio país, pero lo hicieron un 35% en Formosa, un 29% en Misiones, un 24% en Corrientes y un 22% en Entre Ríos”, explicaron.