Vía Tres Arroyos
Colorinches Tresarroyenses: Por cuatro días locos
Quienes la vivieron saben que las primaveras en Claromecó son inolvidables, la primera por ser la primera, testigo directo de nuestra “libertad” inicial, de hacer o deshacer “a gusto y piaccere”; la última por ser el final de una etapa imborrable en nuestras vidas, la última antes de que cada cual, cada amigo o compañero tome un rumbo distinto de cara a su futuro.