Se propuso comer en un bodegón de cada barrio de Buenos Aires sin canjes: “Quiero la experiencia real”

Con sus videos virales, Comentino quiere ofrecer reseñas honestas de los restaurantes que visita en cada barrio porteño.

Se propuso comer en un bodegón de cada barrio de Buenos Aires sin canjes: “Quiero la experiencia real”
Recorre un bodegon por cada barrio de Buenos Aires

A sus 27 años, Lisandro Schamberger ha convertido su amor por la comida y su curiosidad por conocer en un proyecto que captura la esencia de la gastronomía porteña. Oriundo de Olavarría, provincia de Buenos Aires, se mudó a la capital - como muchos - para estudiar Relaciones Internacionales y Derecho, carreras que completó en 2019 y 2022, respectivamente. Pero su verdadera pasión lo llevó por otro camino: recorrer los 48 barrios de la ciudad en busca de los mejores bodegones.

Comentino es influencer gastronómico en redes sociales, lo han invitado a comer en diferentes restaurantes, pero quiso probar algo nuevo: recorrer los barrios porteños buscando bodegones.
Comentino es influencer gastronómico en redes sociales, lo han invitado a comer en diferentes restaurantes, pero quiso probar algo nuevo: recorrer los barrios porteños buscando bodegones.

En diálogo con Vía Gourmet, Comentino (como se puede encontrar en las redes sociales) explicó qué lo llevó a comenzar este llamativo proyecto, además de cómo organiza cada uno de sus videos y lo que hará el día que termine de recorrer cada uno de los barrios de Buenos Aires.

Recorrer los 48 barrios de Buenos Aires en bodegones

Desde hace dos años y medio, Lisandro genera contenido gastronómico en redes sociales. Sin embargo, sentía que necesitaba darle un nuevo enfoque a su propuesta. “Me sentía estancado, visitando lugares que ya habían sido reseñados por otros creadores, sin sentir que estaba aportando algo que realmente me distinga”, cuenta. Fue entonces cuando se le ocurrió un concepto original: visitar un bodegón por semana en cada barrio porteño.

No hay nada más de barrio que un bodegón. Son lugares accesibles, con historia, que la gente ama”, explica. Pero antes de lanzarse, necesitaba confirmar su teoría: “Investigué cuántos barrios hay en CABA y si realmente existía al menos un bodegón en cada uno”. Al descubrir que eran 48 barrios, decidió organizar su recorrido en orden alfabético, comenzando por Agronomía y culminando en Villa Urquiza.

La experiencia gastronómica de un foodie pero sin canjes

Uno de los aspectos que distingue a Lisandro de otros creadores de contenido gastronómico es su compromiso con la autenticidad: para esta serie de 48 bodegones no acepta canjes.

“No acepto canjes porque quiero mostrar una experiencia genuina, como cualquier persona que sale a comer y paga su cuenta”. Su objetivo es brindar reseñas honestas, mostrando si la comida vale la pena o no. “La gente valora mucho esto, porque es algo que escasea en redes”, afirma.

Comentino publica en su perfil de Instagram la cuenta de cada bodegón que visita para demostrar que la experiencia fue 100% real y no por canje.
Comentino publica en su perfil de Instagram la cuenta de cada bodegón que visita para demostrar que la experiencia fue 100% real y no por canje.

Para elegir los bodegones, se basa en su experiencia personal, recomendaciones de seguidores y reseñas en Google Maps. “Si un bodegón tiene miles de reseñas positivas, probablemente tenga más historia y trayectoria”, comenta.

El bodegón ideal, en palabras de Comentino

Lisandro ha reflexionado mucho sobre qué define a un bodegón y lo explica así: “Es un restaurante popular con comida abundante y casera, sin lujos, pero con una atención cercana y precios accesibles. Un buen bodegón tiene bebidas grandes, soda de sifón, camisetas de fútbol colgadas y mozos con décadas en el oficio”.

Sus videos en cada bodegón muestran un poco del lugar, de sus platos y terminan con el postre ideal: un flan.
Sus videos en cada bodegón muestran un poco del lugar, de sus platos y terminan con el postre ideal: un flan.

A lo largo de su recorrido, ha visitado lugares que lo marcaron. “Rondinella en Chacarita me encantó por su historia y atención. El Tábano en Coghlan tiene milanesas espectaculares y es atendido por una familia de mujeres que te hace sentir en casa. El Ferroviario es un clásico con una parrilla increíble. Y La Cocina de Batata´s en Floresta me sorprendió con su carne al horno, que es de otro planeta”.

Aunque antes de la serie su elección fija era la milanesa napolitana, con el tiempo ha ampliado su paladar. “Ahora me animo más a las carnes al horno, las pastas y platos tradicionales como el osobuco o el lomo al champiñón”, comenta.

Para quienes quieran disfrutar al máximo la experiencia en un bodegón, Lisandro tiene un consejo clave: “Preguntar al mozo. Ellos saben cuál es el plato estrella del lugar. Son apasionados y quieren que comas bien”.

Con su serie en marcha y miles de seguidores acompañando su recorrido, Lisandro ha encontrado su espacio en el mundo de la gastronomía, celebrando la esencia de los bodegones y la riqueza culinaria de Buenos Aires. Si bien todavía no tiene definido qué hará cuando logre recorrer los 48 barrios, algunas ideas ya comienzan a aparecer: “Una vez que termine, lo más probable es que no haga una segunda vuelta, sino que tome rumbo para otros lados”.

Una idea que le surgió es la de probar con algo diferente: visitar las 24 provincias de la Argentina, pero por el momento solo es un deseo más que una certeza. “Comer esta vez no en un bodegón para no caer en el estricto que tiene que ser sí o sí un bodegón o cumplir con ciertas características, sino ir a un restaurante popular de cada provincia donde se coma rico”, adelantó, aunque todavía no tiene algo definido.

Por el momento, a Lisandro le faltan 31 barrios de Buenos Aires, por lo que el camino todavía es largo.