Familias que viven en asentamientos pidieron al Gobierno "servicios básicos y acceso a viviendas"

Los habitantes de los asentamientos de los barrios 17 de Agosto, Molina Punta y Popular marcharon esta mañana en reclamo por tierra, vivienda y un hábitat digno, la movilización fue pacífica alrededor de la rotonda de la Virgen de Itatí. Las familias ocupan terrenos privados y estatales por lo que solicitaron a la Municipalidad de Corrientes predios con servicios básicos accesibles para las personas en situación de vulnerabilidad y que no pueden cumplir con los planes de pagos para acceder a un hogar estatal.

El Foro de Comisiones Vecinales y Organizaciones Barriales acompañó el pedido, la comisión vecinal realizaron varios pedidos para el acceso a vivienda y tierras para los habitantes de los asentamientos. También abogaron al Concejo Deliberante de la ciudad para que cumpla con la ordenanza que establece la creación de bancos de tierras para familias en la calle.

"Vamos a estar acompañando a las familias que fueron desalojadas de los terrenos del barrio 17 de Agosto en el reclamo que van a estar realizando en la zona de la rotonda de la Virgen de Itatí, solicitando a la Municipalidad por tierras y viviendas", afirmó el referente de la comisión vecinal, Julio Maciel.

Además, Maciel aseguró que "se van a sumar las familias del barrio Molina Punta que fueron intimadas por un posible desalojo y otros vecinos del barrio Popular que se encuentran en situaciones similares ante la falta de terrenos y viviendas propias".

Los manifestantes son familias que ocupan terrenos públicos y privados ya que no les queda opción donde vivir debido a la falta de recursos. Reclaman la necesidad de una vida digna por medio del acceso a servicios básicos y casas propias. Muchas de estas personas viven hace décadas en asentamientos irregulares como los del barrio Molina Punta. Según publicó El Litoral.

Días atrás el Foro Vecinal lanzó un comunicado en el que denunciaban el intento por parte del Estado de desalojar a los vecinos de Molina Punta y trasladarlos a un descampado "flojo de papeles". Una parte del comunicado expresó: "Cómo se pretende que un grupo de familias abandonen sus casas que durante muchos años y sacrificio han construido, cómo puede más la insensibilidad de unos funcionarios ofrecer bajo amenazas de o firman todos o nada y se procede a un desalojo si no aceptan ir a un descampado flojo de papeles es decir sin las garantías mínima de que algún día otra gestión lo limpien, peor aún sin ofrecerles siquiera una vivienda social".