Condenaron a un sanjuanino a 7 años de prisión efectiva por violar a su amiga

El hecho ocurrió en marzo del 2021 y el abusador fue identificado como Gastón Raúl Castro Godoy.

La Justicia sanjuanina condenó a la pena de siete años de prisión efectiva a un sujeto identificado como Gastón Raúl Castro Godoy por el delito de abuso sexual con acceso carnal contra una joven.
La Justicia sanjuanina condenó a la pena de siete años de prisión efectiva a un sujeto identificado como Gastón Raúl Castro Godoy por el delito de abuso sexual con acceso carnal contra una joven.

Un sanjuanino identificado como Gastón Raúl Castro Godoy fue condenado por la Justicia de San Juan a la pena de 7 años de prisión efectiva por el delito de abuso sexual con acceso carnal contra una joven. El hecho ocurrió el 24 de marzo del 2021 durante una reunión de amigos, en el departamento Zonda.

Según relataron fuentes judiciales, la denunciante se reunió junto a una amiga y dos hombres (entre ellos el abusador, ahora condenado) en una casa de Zonda con bebidas alcohólicas de por medio. En un momento, Castro se retiró a uno de los dormitorios a descansar, cuando las dos chicas se acercaron a ver si estaba dormido, por lo que ambas salieron de la habitación al rato.

Posteriormente, según las fuentes judiciales intervinientes en la investigación, el condenado se levantó de la cama y abordó a su víctima, metiéndole la mano en la entrepierna para subirla a su hombro, llevándola alzada hasta la habitación mientras ella le daba trompadas en la espalda. Luego, la tiró sobre la cama, la agarró de su muñeca izquierda con fuerza y con su otra mano le tiró el pelo, mientras la víctima intentaba levantarse. Castro insistió y se subió nuevamente encima de su víctima, mientras ella gritaba llamando a su amiga.

En ese contexto, indicaron, una persona entró a la habitación y el abusador simuló haberle estado haciendo cosquillas a la joven. La incómoda situación para la víctima continuó, de hecho, Castro insistía con la fuerza para someterla. En un momento la mordió varias veces en la espalda diciéndole “si sé que te gusta, mordeme vos, dale perra”. Cuando la denunciante logró zafar, el abusador se paró en la puerta y le dijo “dame un beso y te dejo ir”, a lo que ella accedió con el objetivo de escapar. Con miedo a ser nuevamente abordada por su acosador, le pidió a su amiga que no se durmiera aunque no tuvo mucho éxito.

Cuando la amiga de la denunciante se durmió, Castro volvió a atacar sexualmente a la damnificada. Según consta en los relatos de la investigación judicial, él la empujó hasta la habitación y la tiró sobre la cama nuevamente. En esa situación, cuando la víctima quiso escapar, el sujeto la agarró del brazo izquierdo y la obligó a tocarle sus partes íntimas. Siguió insistiendo, la tomó del pelo e intentó que le practicase sexo oral. Posteriormente y a pesar de la negación de la mujer, la violó.