"¿Dónde iremos a parar si se apaga Balderrama?" se preguntaron Manuel J. Castilla y el "Cuchi" Leguizamón. Y tan es así que este templo del folclore cumple 66 años y lo festeja el sábado a lo grande.
Con la actuación estelar del Chaqueño Palavecino, se hará una cena show en el boliche a beneficio de la Fundación H.O.Pe. Tantos adeptos tiene la peña que se agotaron todas las entradas.
El boliche Balderrama nació en Salta en el año 1953, fundado por los hermanos Balderrama, Juan, Daría y Celestino, como un almacén en donde se vendían bebidas típicas de la región. Con el correr del tiempo, comenzaron a frecuentar el lugar las comparsas carnestolendas, que antes de los desfiles pasaban a comer, tomar y bailar un rato.
Después de unos años, se fundó la Picantería Balderrama, ubicada en la esquina de Corrientes (San Martín) e Ituzaingó, y comenzaron a frecuentarla Juan Carlos Dávalos, Eduardo Falú, y César Perdiguero, entre otros, haciéndose común la presencia de poetas y cantores de la época.
En 1956, la peña se trasladó a la esquina de San Martín y Esteco, convirtiéndose en "el refugio de los poetas". Entre los refugiados no era poco frecuente encontrar a Jaime Dávalos, Villegas Sato, el "Cuchi" Leguizamón, Manuel J. Castilla, Hugo Aparicio, Díaz Bavio, Jorge Cafrune, quienes se quedaban hasta horas de la madrugada, cantando, pintando paredes, comiendo y bebiendo.
Tan bohemio se había vuelto el boliche, que los dueños decidieron poner un escenario con micrófono, para que los artistas se explayaran a sus anchas.
Fue entonces que Manuel J. Castilla compuso su poema "Balderrama" y se la entrego al "Cuchi" Leguizamón para que la hiciera canción. Desde entonces, el boliche comenzó a hacerse más y más famoso, y culminó su pico de fama cuando Mercedes Sosa cantó la zamba, difundiéndola por todo el país.
A 66 años de su nacimiento, el boliche es conocido a nivel nacional e internacional, y artistas del folclore renuevan su repertorio año tras año en el escenario de esta mítica peña.