Hermano de “Cachete” Díaz se declaró culpable en la causa sobre juego ilegal

El joven había sido acusado de extorsionar a comerciantes a partir del vínculo con un jefe de “Los Monos”.

La audiencia sobre el procedimiento abreviado se llevó a cabo en el Centro de Justicia Penal de Rosario. (Leandro Strappa)
La audiencia sobre el procedimiento abreviado se llevó a cabo en el Centro de Justicia Penal de Rosario. (Leandro Strappa)

La Justicia rosarina condenó a 5 años de prisión a uno de los integrantes de la asociación ilícita denunciada en relación a una red de juego ilegal en la región. Se trata de Brian Exequiel Díaz, hermano de uno de los organizadores de la banda vinculada al ex fiscal regional Patricio Serjal y otros funcionarios del Ministerio Público de la Acusación (MPA).

El joven aceptó su responsabilidad penal como miembro de dicha organización y también como coautor de extorsión. Según la investigación que comenzó hace un año con el asesinato del gerente bancario Enrique Ensino en el casino City Center, los delincuentes recaudaban dinero mediante amenazas a comerciantes y también manejaban negocios ilícitos como casinos y quiniela clandestina.

La jueza Valeria Pedrana homologó ese jueves el acuerdo entre la defensa y los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra para resolver la causa contra el muchacho. En cuanto a sus antecedentes, fuentes oficiales recordaron que fue parte de la asociación ilícita al menos entre agosto de 2019 y enero de 2020.

Durante ese período, los hechos denunciados tenían como hilo conductor la conexión con Ariel Máximo Cantero. El presunto jefe de la banda es Maximiliano Díaz, quien aludía a su relación con el jefe de “Los Monos” a la hora de apretar a dueños de bares y otros establecimientos. Si no pagaban, se encargaba de planificar atentados para asegurarse el pago periódicamente.

El MPA determinó que el hermano de “Cachete” era una de las personas que participaba en las reuniones para pedir la plata. También puso a disposición celulares para llamar a las víctimas y enviarles mensajes. En un caso puntual se comprobaron varias entregas de efectivo en un bar ubicado sobre Pellegrini al 1600, donde Flavia Broin iba a cobrar bajo las órdenes de su pareja y supuesto líder.

Parte de la investigación avanzó el año pasado a partir del testimonio de Leonardo Peiti, quien pasó de ser víctima a cómplice de los extorsionadores. Al empresario lo señalan como uno de las máximas figuras vinculadas al negocio del juego ilegal y denuncian que se encargaba de pagarle a Serjal y al ex fiscal Gustavo Ponce Asahad a cambio de protección judicial. Más adelante apuntaron como otro organizador al senador provincial Armando Traferri, aunque no llegaron a imputarlo.