Amalia Granata respondió a las críticas por seguir junto al novio que la engañó: "Se indignan porque no lo maté"

La modelo rosarina, que acaba de ser mamá de Roque, dijo que tuvo que apelar al humor para sobrellevar esa situación.

La periodista y el empresario Leonardo Squarzón volvieron a casa junto a su bebu00e9.
La periodista y el empresario Leonardo Squarzón volvieron a casa junto a su bebu00e9.

Amalia Granata sigue siendo blanco predilecto de los programas de chimentos que le pegan cada vez que pueden porque sigue junto a Leo Squarzon, el novio que la engañó en pleno embarazo. Ya con Roque recién nacido, la rosarina aprovecha para seguir defendiendo a su pareja. "Querían que actuara violentamente y como no lo hice, se indignaron", dijo.

Amalia reafirmó que "nunca fue un conflicto" el episodio por el que su pareja mantenía un affaire con Pau Linda, mientras ella estaba embarazada. "Hago chistes con mis amigos por lo que ocurrió. Si no fuera por el humor, no hubiera podido resolver la situación como decidí resolverla. No es un tema, no me produce celos ni inseguridad", dijo al programa televisivo Los Ángeles de la Mañana.

Al ser consultada por si le afectó, respondió: "Me afectó cuando decían cosas que no eran. Veíamos en un programa alguien que criticaba, y yo le decía (a Leo): 'Yo sé de este tal cosa, tal cosa y tal cosa'. ¿Desde qué lugar me criticás a mí? ¡Dale! Tenés un pasado intenso para ponerte a señalar, y hablar de moral y de todas las pavadas que escuché. Nadie puede hablar de moral en este medio", apuntó.

Más adelante remarcó cuál fue el punto de la discordia. "La indignación de todos fue porque yo lo había perdonado. Se desarticuló el tema cuando no lo maté contra una pared o no lo tiré del balcón de mi casa. Esperaban violencia. Hablaban de Ni una menos, de violencia, y esperaban que lo matara. Fue contradictorio, un doble mensaje", dijo aunque aclaró que si esto hubiera ocurrido cinco años atrás "lo mataba".

Por último Granata resaltó que con la llegada de Roque, nacido el 14 de diciembre, todo cambió para bien. “Leo se acuesta con el bebé, lo mira y llora. No puede creer sentir tanto amor por alguien. Le pegó muy fuerte”, señaló.