Posadas adorna sus calles para dar comienzo a la temporada de las fiestas navideñas

Comenzando diciembre, Posadas se inunda de espíritu festivo para recibir las fiestas navideñas hacia fin de año. Arbolitos, trineos y las clásicas flores recicladas son algunos de los elementos elegidos para decorar la ciudad durante estas fechas.

Posadas adorna sus calles para dar comienzo a las fiestas navideñas.
Posadas adorna sus calles para dar comienzo a las fiestas navideñas.

Faltan sólo 3 días para la fecha tradicional del armado del Árbol de Navidad, y en vistas a tal fecha la capital misionera adquiere tonalidades rojas, verdes y blancas para recibir las fiestas de fin de año. Comercios, plazas y hasta la Costanera reflejan el espíritu navideño con decoraciones alusivas.

En este caso, la plaza 9 de Julio, ya cuenta con un gran trineo y “una casa de Papá Noel” que son aprovechados por las personas que visitan o que residen en la ciudad para tener una foto navideña.

La tradición de armar el arbolito

Si bien no hay una única versión y varía según cada cultura, la tradición de adornar un pino logró consolidarse como una de las más importantes del año. Desde los pequeños que decoran un rincón de la casa hasta las grandes instalaciones públicas, la costumbre es celebrada en todo el planeta.

El 8 de diciembre es el Día de la Inmaculada Concepción, debido al dogma de la Iglesia católica decretado en 1854 que sostiene que la Virgen María estuvo libre del pecado original desde el primer momento de la concepción de su hijo Jesucristo.

La Plaza 9 de Julio adornada para recibir las fiestas.
La Plaza 9 de Julio adornada para recibir las fiestas.

Asimismo, en esta fecha se arma el árbol de Navidad, que adorna los hogares hasta el 6 de enero, Día de Reyes. Muchos destacan que este hito en la vida cristiana dio origen a la tradición del pino decorado.

Pero lo cierto es que no hay una única versión sobre por qué se acostumbra a armar el árbol de Navidad el 8 de diciembre y varía según cada cultura. Tomando otra explicación posible, fueron los celtas quienes tenían por costumbre adornar un roble por la llegada del solsticio de invierno ya que, de esta manera, se aseguraban el regreso del sol.

Por otro lado, se dice que en este día los nórdicos solían adorar con un árbol el nacimiento de Frey, dios del sol y la fertilidad. Y según el relato que trascendió, en Argentina la costumbre de armar el arbolito comenzó en 1807, cuando un irlandés trasladó este hábito al país decorando un pino en una plaza pública.

Fuente: Misiones Online