Por qué es importante establecer proyectos y metas para el siguiente año

Con la llegada de fin de año tan cerca, Vía País le consultó a dos especialistas la importancia de crear metas tras tanto tiempo en pandemia y el cómo se pueden fijar objetivos para el 2022.

Por qué es importante tener metas para el próximo año. (Foto: Freepik)
Por qué es importante tener metas para el próximo año. (Foto: Freepik)

El 2022 esta cada vez más cerca y, como cada final de año, las personas comienzan a fijarse nuevos objetivos, se compran agendas para anotar objetivos o, en algunos casos, se empiezan a hacer planes para meses por llegar. Pero, ¿por qué es para nosotros tan importante hacer esto?

Para darle una respuesta a esta inquietud, el equipo de Vía País conversó con Cecilia Salas Gatti, Psicóloga y Directora Ejecutiva de Casaclub Baires, y con Melisa Mirabet, Psicóloga clínica y Psicoterapeuta Cognitivo Conductual, para conocer un poco más sobre este tema.

Los 31 de diciembre se han convertido en la fecha donde más se crean nuevas metas y proyectos. (Foto: Freepik)
Los 31 de diciembre se han convertido en la fecha donde más se crean nuevas metas y proyectos. (Foto: Freepik)

Qué nos generó la pandemia y cómo podemos volver a a la normalidad

“La finalización de un año nos lleva, generalmente, a hacer una evaluación sobre lo vivido y pensar proyectos con objetivos y metas para el año entrante”, explica Cecilia Salas Gatti, Psicóloga y Directora Ejecutiva de Casaclub Baires.

La vida cotidiana, desde la aparición de la pandemia de COVID - 19, cambió radicalmente. La incertidumbre continúa y esto genera, en algunas personas, múltiples reacciones como: estados de ansiedad, sentimientos de frustración, tristeza y enojo entre los mas destacados.

Muchos proyectos, metas y objetivos que habían establecido no se pudieron concretar y fueron reemplazados esencialmente por una sensación de inseguridad e incertidumbre casi constante.

Por eso, el final del año adquiere una importancia fundamental para reflexionar, especialmente esta época es propicia para “barajar y dar de nuevo”, poder pensar y recuperar aquellos proyectos que se abandonaron, crear otros nuevos y establecer nuevos objetivos y metas para el año que viene. Repensar todo esto podría ser una de las actividades más importantes en los días que quedan del 2021 que, seguramente, tendrá un impacto especialmente positivo en la vida.

Situarse en el aquí y ahora para saber dónde se quiere ir y dónde se quiere estar en los próximos días, meses o años es un esencial desafío. Esos objetivos deben ser personales, realistas y razonables. Incluso, sería ideal si pueden ser cuantificables porque permitirán identificar con mayor facilidad los pequeños éxitos a lo largo del año. Hacer altos, giros y evaluar en que lugar uno se encuentra respecto a esas metas permitirá llevar adelante la adelante la concreción del proyecto de vida que se desea. Se podrá ver de manera clara dónde hay que poner más esfuerzo, dónde focalizarse y en qué lugar se está posicionado.

¿Cómo se vincula la motivación con esto? La motivación en el ser humado se presenta en dos formas. La primera es la motivación externa, que viene dada desde el exterior, cuando se nos ofrece algo a cambio (puede ser una aprobación, un premio, un reconocimiento). La segunda, la interna, viene desde el interior y busca la autorrealización, el propio desarrollo y la satisfacción propia. La motivación hace que se lleven adelante las tareas cotidianas sin sentirlas una carga y se relaciona con la autoestima y las funciones ejecutivas como la atención, la concentración y la memoria, bajando de manera significativa los niveles de estrés.

Sería ideal si las metas pueden ser cuantificables porque permitirán identificar con mayor facilidad los pequeños éxitos a lo largo del año. (Foto: Freepik)
Sería ideal si las metas pueden ser cuantificables porque permitirán identificar con mayor facilidad los pequeños éxitos a lo largo del año. (Foto: Freepik)

Los proyectos y metas deben incluir todos los aspectos de la vida: laboral, social, familia, pareja, educación, cuidado del cuerpo y salud, entre otros. Mantener todas estas esferas sanas, controladas y bajo metas lo más claramente fijadas, permite aumentar el bienestar psicológico y mejorar la calidad de vida.

Acá hay que hacer una pequeña aclaración: la calidad de vida tiene que ver con un aspecto subjetivo de la persona, es la percepción que la persona tiene y hace sobre su posición lo que incluye, metas y expectativas y no se relaciona en manera alguna con el nivel económico con el cual el sujeto se administra o maneja.

Por qué es importante establecer metas y cómo podemos hacerlo

“‘Si uno no sabe a qué puerto navega, ningún viento es favorable’, es una famosa frase atribuida al filósofo Seneca y resulta oportuna para pensarla frente a un nuevo año y las resoluciones habituales”, asegura Melisa Mirabet, Psicóloga clínica y Psicoterapeuta Cognitivo Conductual.

Si no nos planteamos metas, no tenemos cierto grado de dirección y enfoque en nuestras decisiones, podríamos desperdiciar nuestro tiempo, energía y recursos. Es importante encontrar siempre metas que motiven nuestro día a día ya que esa motivación marcará el inicio de la ejecución, es decir cuándo comienzo a trabajar por ellas, la dirección, qué tengo que hacer para llevarlas a cabo y el mantenimiento de la conducta, que refiere a cómo voy a darle continuidad.

Es importante encontrar siempre metas que motiven nuestro día a día para que no sean una carga y se puedan cumplir. (Foto: Freepik)
Es importante encontrar siempre metas que motiven nuestro día a día para que no sean una carga y se puedan cumplir. (Foto: Freepik)

Existen muchas propuestas y pasos a seguir cuando deseamos plantearnos metas, pero aquí les comparto algunas cuestiones que deben contemplarse frene a las nuevas resoluciones.

  • Identificar tus valores: recordá que los valores son las cosas importantes para vos, lo que aprecias de la vida y tus prioridades. Es importante definirlos primero ya que motivan nuestros comportamientos y guían nuestras decisiones. Muchas veces vemos una meta aislada, pero si forma parte de un valor personal que deseamos cultivar, tendremos visión más amplia para poder trabajarlos. Ejemplo: “independencia”.
  • Plantear metas a trabajar dentro de ese valor: Comenzá siempre por pensar en una meta que sea clara, específica, que defina bien qué es lo que querés conseguir, siendo realista y positiva. Ejemplo: “este año voy a irme a vivir solo”.
  • Definir los objetivos: son más específicos y estructurados que la meta, ya que se pueden medir y observar los resultados. Pueden tener fecha límite para su consecución y requieren que se dividan en objetivos más concretos o pequeños pasos. Ejemplo: “esta semana voy a visitar estas propiedades”.