Las anécdotas de Chiqui Pérez tras su retiro: el día que pidió la 10 de Belgrano

Jugó en el Pirata, en Suecia, en República Dominicana y en Boca, donde inició una buena relación con Juan Román Riquelme. Las vivencias de un trotamundos.

Un marcador central con recursos y gol, de pico de rendimiento en Belgrano. Claudio Chiqui Pérez dejó el fútbol, sobran las anécdotas (La Voz archivo).
Un marcador central con recursos y gol, de pico de rendimiento en Belgrano. Claudio Chiqui Pérez dejó el fútbol, sobran las anécdotas (La Voz archivo).

Claudio Pérez colgó los botines. Anunció que deja la práctica activa del fútbol, y comenzó a desempolvar recuerdos y anécdotas de su vasta trayectoria, que tuvo picos altos en Belgrano y Boca, pero que además lo llevó por lugares como Suecia, Costa Rica y República Dominicana.

Su paso por Belgrano fue el que más lo marcó, al punto de volverse hincha del Pirata y decidir radicarse en Córdoba. Con su estilo desenfadado, una vez pidió la camiseta con la 10 en la espalda. “Se había ido el Mudo Vázquez y quedó libre, así que la pedí, tan malo no soy... El Ruso Zielinski sólo me miraba, sin decirme nada. Y Teté González se arrimó y me dijo ‘Chiqui, seamos serios’. Yo me hubiera animado”.

Muchos de esos momentos los compartío en el programa De la cancha al living, que se emite los viernes a las 23 por canal Showsport, y con un ping pong temático entre los dos clubes que más emociones le generan, Belgrano y Boca.

LA RELACIÓN DEL CHIQUI PÉREZ CON RIQUELME EN BOCA, CUESTIÓN DE PESO Y DE PELO

En Boca compartió plantel con Juan Román Riquelme, actual presidente Xeneize. “No llegamos a ser amigos, pero había un buen trato”, recordó Chiqui Pérez. Se dio el gusto de ser dirigido por Carlos Bianchi en un club del que también es hincha, y convirtió dos goles en 32 partidos como titular.

Se viene el debut del "Chiqui" Pérez en Boca. (Foto: Fotobaireres)
Se viene el debut del "Chiqui" Pérez en Boca. (Foto: Fotobaireres)

Las exigencias del mundo Boca lo pusieron ante situaciones complejas. “Por un kilo de más que tenía llegaron a decir que estaba gordo. La presión era tanta que perdí el pelo en una parte de la cabeza”. Tan mal llegó a estar que falló en lo que era casi infalible, cuando Sebasitán Torrico le contuvo un penal contra San Lorenzo.