Investigan el exISER de Azul, donde funcionó un centro clandestino de detención durante la dictadura

El Tribunal Oral Federal de Mar del Plata encabeza este jueves una inspección ocular en el predio donde funcionó el exInstituto Superior de Educación Rural de Azul (ISER), donde funcionó un centro clandestino de la detención durante la última dictadura cívico militar, en el contexto del juicio oral y público que se sigue en la causa de lesa humanidad denominada como “La Huerta”, en Tandil.

En este proceso se analizan crímenes perpetrados en perjuicio de 70 personas que en tiempos del terrorismo de Estado vivían en las localidades bonaerenses de Tandil, Azul y Saladillo. La inspección se realizará a partir de las 16 y el viernes, a partir de las 10, se desarrollará en la sede que la Universidad Nacional del Centro (Unicen) tiene en Azul, la audiencia 31 de este juicio, que proseguirá con las declaraciones de siete testigos.

El exISER formó parte del circuito represivo que perteneció a la Sub Zona 12 y que abarcó los centros clandestinos de detención “La Huerta”, las comisarías Primera y Segunda de Tandil, la “Chacra de Méndez”, el Jardín Maternal De Paula, la ex Delegación de la Policía Federal (hoy Juzgado Federal), la Comisaría 1°, la Unidad 7 y el Regimiento de Azul.

El ISER funcionaba en el predio del que fue el Palacio Sans Souci, ubicado en las afueras de Tandil que fuera construido en 1909 por pedido del estanciero José Santamarina y su esposa Sarah Wilkinson. Luego de que los herederos intentaron venderlo, en 1949 fue expropiado por el gobierno de Juan Domingo Perón y pasó a ser lugar de descanso de los gobernadores de la provincia de Buenos Aires.

En 1954, se creó en ese predio el Instituto “Eduardo Olivera”, dedicado a la formación de mujeres que cursaban la carrera de “Visitadoras Técnicas del Hogar Agrícola”. Cinco años después, el gobierno de Arturo Forndizi creó en esas instalaciones el Instituto Superior de Educación Rural.

A principios de mayo de 1976, en los inicios de la última dictadura, se instaló allí un grupo del Ejército y el Instituto fue cerrado “por razones de austeridad” para ser convertido en un centro clandestino de detención.

Por otra parte, el lunes a las 9 en la ciudad de Rosario, continuarán las testimoniales en el cuarto tramo de la denominada megacausa Guerrieri, que investiga delitos cometidos en el Gran Rosario, en el circuito de seis centros clandestinos de detención que estuvieron bajo el mando operativo del II Cuerpo de Ejército, y en el que están siendo juzgados 17 acusados que actuaron en prejuicio de 116 personas.