Se reavivó el conflicto con entre una comunidad guaraní y una empresa por la extracción de madera

La comunidad ubicada en Campo Grande asegura que los árboles nativos están en su propiedad, consideradas sagradas pero el ministerio de Ecología autorizó la extracción.

El conflicto comenzó en febrero y se reavivó en esta etapa de la cuarentena
El conflicto comenzó en febrero y se reavivó en esta etapa de la cuarentena

La firma Carba SA, retomó las actividades, con autorización del ministerio de Ecología para la extracción de árboles nativos, en territorios que la comunidad mbya guaraní Tekoa Ka'a Kupe y se reavivó el conflicto en la zona de Campo Grande.  El ministro de Ecología de Misiones, Mario Vialey, reconoció que las tareas se retomaron en dos lotes debido a que el sector forestal está exceptuado por ser una actividad considerada de Servicios Esenciales por disposición provincial y nacional.

"Respetando el Lote 3, que fue el señalado como un lugar sagrado por una de las comunidades – de cinco que conviven con la empresa-, se autorizó a continuar con su plan de aprovechamiento de Bosques Nativos en la propiedad según lo previsto por la legislación vigente", explicó. Sin embargo, los integrantes de Tekoa Ka'a Kupe rechazan que se continúen autorizando actividades de aprovechamiento forestal en lo que consideran su territorio.

En febrero de este año, entre varios miembros de tres comunidades, habían frenado las actividades y pidieron la intervención de los organismos públicos para definir el no avance en lugares que en su cultura son considerados sagrados.

Desde Ecología informaron que fueron atendidos sus planteos en forma voluntaria por la empresa, pero la extracción de árboles como actividad productiva de Carba SA continuará en el marco de la ordenación forestal vigente.

Vialey, indicó que en este tiempo se revisaron los procedimientos y que la empresa tiene los planes forestales autorizados para la extracción selectiva de bosques nativos. "Es una empresa que siempre mostró predisposición de participar en las mesas de negociación y aportan a los planteos propuestas superadoras. Necesitamos en Misiones más empresas como esta. Hay en proyecto una posibilidad de destinar 1000 hectáreas de manera intangibles para su conservación y acordar con las comunidades una solución de fondo respecto a la territorialidad futura", indicó.