Violencia obstétrica: una forma de maltrato de género que permanece invisibilizada

La campaña “Mi parto, mi decisión” comienza a tomar fuerza en Buenos Aires y te contamos de qué se trata.

Violencia obstétrica: una forma de maltrato de género que permanece invisibilizada
Mi parto, mi decisión es una nueva campaña.

La violencia es una realidad que, tristemente, existe de muchas formas. Una de las más conocidas es la de género, la cual miles de mujeres en Argentina padecen a diario. Pero lo cierto es que no es la única porque, si bien es la más conocida y por la que más se lucha, hay otro tipo de violencias que han perdido visibilidad.

Una de ellas es la violencia obstétrica, un tipo de violencia de género que a pesar de que no parece, existe y está totalmente naturalizada a pesar de que miles de personas no saben que lo que les sucedió es violencia obstétrica. Por eso, para poder darle visibilidad, un grupo de personas autogestionadas han impulsado la campaña: “Mi parto, mi decisión”.

El pañuelo de Mi parto, mi decisión.
El pañuelo de Mi parto, mi decisión.

Se trata de la primera campaña nacional en contra de la violencia obstétrica, la cual nació a través de las redes sociales a partir de distintos relatos que muestran cómo sufrieron este tipo de agresión. Con el máximo objetivo de dejar de naturalizar estas cuestiones, esta lucha comienza a tomar cada vez más fuerza en Argentina.

¿En qué consiste la campaña “Mi parto, mi decisión”?

Esta campaña es completamente apartidaria y está impulsada por personas autogestionadas y autoconvocadas. Tal es así que todos los que quieren sumarse a trabajar lo hacen ad honorem. Entre ellos, se encuentra Marina Ríos, quien forma parte de la comisión directiva de esta campaña.

Marina Ríos es Doula oficialmente desde 2020, pero siente la profesión desde siempre. Para ellaser Doula es sostener y acompañar el período Perinatal como un portal transformador y se sintió completamente atraída por esta campaña y la lucha en contra de la violencia obstétrica.

“Esta lucha me atrajo porque es la parte a la que yo no puedo llegar de forma personal. Yo trabajo con las mujeres y personas gestantes durante su período de gestación, pero no estoy la mayoría de las veces en las instituciones”, asegura.

Marina Ríos, Doula.
Marina Ríos, Doula.

Marina agregó que no puede influir de forma personal en el momento en el que las personas ingresan a las instituciones y sistemáticamente sin importar la información que cada familia tenga. “El sistema se encarga de vulnerarlas y violentarlas”, aseveró.

Esto, incluso, existiendo la ley de parto humanizado en Argentina, no está logrando asegurar el cumplimiento. Por eso, “esta campaña pretende impulsar nueva legislación, estar en la agenda pública y generar un cambio en la conciencia colectiva. Esto no se logra de forma individual, sino a través del colectivo”.

Por otro lado, hay que destacar que Mi parto, mi decisión, según cuenta Ríos, además de su lema, tienen un pañuelo rojo y un símbolo que es un mandala, el cual representa los partos en la historia de la humanidad. Asimismo, la Doula explica: “El objetivo de la campaña es sancionar y promulgar una ley que obligue al personal sanitario, tanto público como privado del país a tomar una capacitación referida a la violencia obstétrica”.

Ríos asegura que el objetivo es sacar “una ley análoga a la Ley Micaela (la cual obliga al personal del estado a capacitarse en contra de la violencia de género), pero para la violencia obstétrica que sea para el personal de la salud”. “Mi parto, mi decisión” también tiene el objetivo de que se dejen de naturalizar situaciones que sí son violencia obstétrica y que las mujeres que llegan al momento del parto dejen de sufrirlas, en especial si no saben que lo están sufriendo.

De hecho la violencia obstétrica es aquella que ejerce el personal sanitario sobre las mujeres, las personas gestantes y los bebés que involucra, incluso, el incumplimiento de derechos humanos fundamentales como el derecho a la información, a la salud, a la intimidad y a la vida, según explicó Marina Ríos. Después, la Doula también contó que hay un montón de prácticas que están en la vida cotidiana de los partos y nacimientos como las intervenciones médicas de rutina en gestaciones y partos saludables sin consentimiento informado, sin aviso de qué va a ser es procedimiento o sin aviso de los riesgos, beneficios y consecuencias.

Ríos también explicó que la manipulación de los tiempos de los nacimientos, los malos tratos físicos y verbales, la infantilización de las personas que pasan ese tipo de procesos y la apropiación del mismo hace que las mujeres y personas gestantes pierdan el protagonismo en sus procesos. “Hay muchas prácticas naturalizadas, incluso en contra de la evidencia científica, como parir sin acompañamiento cuando tenemos una ley de parto humanizado que dice que tenemos derecho a estar acompañadas en gestación, parto y puerperio”, espetó.

La ley que menciona Marina Ríos.
La ley que menciona Marina Ríos.

Es decir, como bien ha dejado en claro Marina Ríos, el mayor objetivo de Mi parto, mi decisión es dejar de naturalizar estas prácticas y darles, tanto a las mujeres como a las personas gestantes, el derecho a la información para conocer este tipo de cosas. Además, estar en la agenda pública, donde ya han conseguido un lugar gracias a su lucha y movilización.