Un remisero pelea por su vida tras recibir una brutal golpiza en un robo

Ocurrió en San Juan. La víctima es un chofer de 23 años que terminó con fractura expuesta de cráneo.

Cuando la Policía llegó a asistir al trabajador, se encontró con un \
Cuando la Policía llegó a asistir al trabajador, se encontró con un \

Un joven de 23 años pelea por su vida en San Juan luego de recibir una brutal golpiza por parte de dos sujetos que lo atacaron para robarle. La víctima es remisero y fue asaltado durante la madrugada de este martes. "Había sangre por todos lados", relataron los policías que lo encontraron adentro de su auto, inconsciente.

Según publicó Diario de Cuyo, el vehículo era un "baño de sangre", había sangre por todos lados, en los asientos y en el volante. Los investigadores creen que, además de darle golpes de puño, le pegaron con algo más contundente, como un palo. "Le partieron la cabeza", dijo un amigo de la víctima al diario local. El joven fue identificado como Marcelo Giménez y está muy grave producto de los golpes que recibió en la cabeza.

El asalto ocurrió en Caucete, un distrito al este de la provincia de San Juan, cuando los delincuentes se hicieron pasar por pasajeros y subieron al auto de Marcelo. El joven es oriundo del barrio Felipe Cobas, también de ese departamento y por eso trabajaba en la zona. Al llegar al barrio Justo P. Castro IV, sobre calle Enfermera Medina, los dos ladrones lo quisieron asaltar y creen que él se resistió, por eso lo terminaron golpeando brutalmente.

Cuando la Policía lo encontró, el remisero fue trasladado al Servicio de Urgencias del Hospital Rawson, en la Capital de la provincia y ahí los médicos diagnosticaron su grave estado. El chofer presentaba fractura expuesta de cráneo, trauma maxilo-facial y politraumatismos. Su familia manifestó al diario sanjuanino que el estado de Marcelo es "desesperante".

Mientras el joven remisero pelea por su vida en una cama del nosocomio público de la provincia, los investigadores de la Comisaría 9na buscan a los asaltantes. Sin embargo, aún no hay pistas de quiénes atacaron a Marcelo.