Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al Impenetrable

Héctor Manzano (60) es de Tunuyán y desde hace 22 años su misión en la vida es ayudar a los demás. Desde 2004 viaja para ayudar a los pueblos originarios del bosque nativo El Impenetrable (Chaco)

Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano.
Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano. Foto: Gentileza Héctor Manzano

Héctor Manzano tiene 60 años, es locutor y vive en Tunuyán, donde es propietario de dos conocidas radios FM. Y aunque trabajar en ellas es una de sus grandes pasiones y a la que ha dedicado su vida, la principal -y que funciona como el combustible de su vida- es ayudar.

“A veces la gente va a pedir ayuda a la oficina de Asistencia Social y le recomiendan que directamente venga a verme a la radio”, resume entre risas Héctor, querido y conocido por todo Tunuyán e, incluso, el Valle de Uco. Hace 22 años que Héctor Manzano decidió no solo vivir su vida, sino también ayudar a los demás (y que, vale decir, es parte de esa vida propia que también vive).

Cualquier acción solidaria o campaña para buscar y conseguir ayuda para quien sea que lo necesite, siempre encontrará lugar en la FM Frontera (91.3 en Tunuyán), una de las más importantes de esta región mendocina al pie de la precordillera de los Andes.

Por ello no resulta del todo sorprendente que Héctor y los voluntarios que quieran sumarse estén planificando una nueva visita al Impenetrable, el bosque nativo ubicado en el corazón de Chaco y donde abundan las necesidades, la precariedad. Y las muertes de quienes alguna vez Eduardo Galeano describió como “Los Nadies” y que “sueñan con salir de pobres”.

Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano.
Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano.

“Cada año vamos alrededor de 30 personas, 30 locos les digo yo. Mandamos un camión, que sale un día antes, con 35 o 40 toneladas de donaciones (comida, ropa, colchones, juguetes y otra mercadería), y salimos nosotros en nuestras camionetas. Todo el que quiera sumarse está invitado”, describe el solidario tunuyanino, quien desde hace 18 años encabeza esta campaña y los viajes, a Vía Mendoza.

Además de mercadería y productos materiales, la caravana incluye también a personal médico para hacer revisiones y atención primaria a los niños, adultos y ancianos que viven en el corazón del bosque.

“A veces nos acompaña Gendarmería, el comisario del pueblo o algún otro referente. Porque la verdad es que si vamos solos, y aunque ya hayamos ido muchas veces, no terminás de conocer el Impenetrable y te podés perder”, describe Manzano.

El próximo viaje partirá el 12 de abril -ese día saldrá el camión con la mercadería y la ayuda-, por lo que Héctor Manzano está en campaña de recolectar todo el material que valletanos y mendocinos puedan aportar para las donaciones.

Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano.
Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano. Foto: Gentileza Héctor Manzan

Mucho más que llevar ayuda

Hace ya varios años, en 2003, un fuerte temporal castigó a la provincia de Santa Fe y causó inundaciones que llevaron a varios ciudadanos a perder absolutamente todo: desde sus pertenencias hasta sus viviendas.

En ese momento, Héctor Manzano organizó la primera campaña desde Tunuyán para ayudar a los damnificados. Y, aunque en ese momento no lo sabía, sería el primer eslabón de una cadena solidaria que lleva ya casi dos décadas y en la que ni siquiera asoma el final todavía.

Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano.
Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano. Foto: Gentileza Héctor Manzano

“A raíz de ese desastre bravísimo en Santa Fe, hicimos una campaña para llevar donaciones. Juntamos tanto material que llenamos completo un camión de 17 metros que salió para el lugar. Pero, vaya uno a saber por qué, la ayuda nunca le llegó a la gente. Entonces, desde ese momento, decidimos ir nosotros acompañando a la caravana, para garantizar que la ayuda llegara. Nunca más mandamos un camión solo”, rememora Héctor, quien -aunque no lo reconoce abiertamente-es probable que no pueda concebir su día a día sin intentar ayudar a quienes más lo necesitan.

La dura realidad del impenetrable

Después de esta experiencia fallida en Santa Fe y de decidir apuntar toda la ayuda al bosque nativo ubicado en el corazón de la provincia de Chaco, la caravana solidaria no ha fallado ni un solo año.

De hecho, las comunidades que habitan en el Impenetrable (como se conoce al bosque) y que principalmente pertenecen a los pueblos originarios Tobas y Wichi, además de unos pocos Qom, ya los esperan y reciben como si fuesen parte de sus familias.

Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano.
Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano. Foto: Gentileza Héctor Manzano

Lo más destacable es que cada vez se suman más voluntarios que aportan, no solo sus vehículos, sino también sus servicios y manos a la obra para ayudar con sus profesiones u oficios.

“Siempre vamos al Impenetrable Chaqueño. Casi siempre vamos los que más conocemos la zona, pero se agregan personas que quieren ayudar. Vamos en nuestras camionetas -algunas-, y también en autos. Cuando llegamos allá, Gendarmería o la Policía pone a disposición algunas de sus camionetas y hasta tenemos gente de la zona que nos ayuda como guías, ayudándonos a entrar y a salir ya que conocen hasta cada uno de los yuyitos del lugar”, resume Héctor.

Luego de los primeros viajes con ayuda material y mercadería, y de detectar las carencias y necesidades de las personas que habitan en el lugar -muchos, la mayoría, en condiciones infrahumanas-, incluyeron a médicos, nutricionistas, enfermeros, odontólogos y otros especialistas para que puedan brindar una atención primaria, básica e indispensable en lo que tiene que ver con la salud.

Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano.
Su segunda casa: Héctor, el mendocino que desde hace 18 años viaja con ayuda al impenetrable. Foto: Gentileza Héctor Manzano. Foto: Gentileza Héctor Manzano

“Nos ha pasado de encontrarnos nosotros mismos, dentro del Impenetrable, con muertos que nadie había registrado. Gente que se muere y la entierran como puedan debajo de chozas. Muchas veces hemos avisado nosotros a la Policía o a Gendarmería de muertes en el lugar”, resume Héctor, con dolor.

A ello se suman los graves casos de desnutrición y embarazo adolescente. “Hay nenas de 12 años con embarazos de más de 6 meses”, grafica el locutor solidario.

Cuándo sale el próximo viaje y cómo ayudar

Héctor y el resto de voluntarios partirán al Impenetrable el 13 de abril próximo. Un día antes, el martes 12, partirá desde Tunuyán el camión con todo el cargamento de ayuda.

“Desde hace ya varios años vamos con especialistas, y también llevamos comida, juguetes, mercadería, algunas golosinas para los chicos, colchones y ropa. No es barato ir (cuesta entre 25.000 y 30.0000 pesos por cada uno de los que van, entre combustible y otros gastos), pero no podemos dejar de hacerlo”, se sincera el locutor y comunicador.

Hasta el propio martes 12 de abril, Héctor y la caravana de voluntarios están abiertos a recibir ayuda de quienes quieran colaborar y sumarse con donaciones.

“Lo que más necesitamos, con una mano en el corazón, son alimentos y combustible para el camión que va a llevar la mercadería. Quienes quieran o puedan colaborar con algo, les pedimos que lo traigan a la radio -en el Barrio Jardín, de Tunuyán- o se comuniquen conmigo al 2622351678″, concluye Héctor Manzano.