Tras los polémicos precios de sus canjes, Coti Romero se defendió de las críticas: “La que puede, puede”

A través de Twitter se habría filtrado la cifra que cobra la correntina. En consecuencia, se abrió un gran debate y la influencer no pudo dejarlo pasar.

Coti Romero se defendió ante las críticas por sus canjes.
Coti Romero se defendió ante las críticas por sus canjes. Foto: Instagram

Tiempo atrás se filtró en las redes sociales cuánto cobraría Coti Romero, ex participante de Gran Hermano, por hacer publicidad en su cuenta de Instagram. Distintos usuarios abrieron un gran debate y la correntina salió en su defensa.

Las cifras difundidas fueron comparadas, a su vez, con una falsa publicación sobre los precios que supuestamente establece el también ex concursante de la casa, Thiago Medina. Las críticas comenzaron a lloverle, y la muchacha no pudo dejarlo pasar.

Los supuestos precios por publicaciones de Coti y una falsa publicación de Thiago.
Los supuestos precios por publicaciones de Coti y una falsa publicación de Thiago. Foto: Twitter

Si bien los datos arrojados del joven eran inventados, lo cierto es que Coti ya suma más de 1.600.000 seguidores, y Thiago a penas roza los 700.000. Este número es importante para definir precios; ambos exjugadores pueden contar con “tarifas” diferentes en sus redes por tener distinto alcance.

Coti Romero, la correntina que estuvo en Gran Hermano, se defendió de las críticas

“Hay gente mala. Vi comentarios que decían que me creía Lady Di. Les quería decir que si no saben, no opinen, pero para qué me voy a calentar”, comenzó hablando Coti en el programa Biri Biri.

Entonces, aclaró: “Soy influencer desde hace mucho. No es lo mismo trabajar solamente en Corrientes. Imaginate que en ese tiempo se cobraba ya buena cantidad de plata. Obviamente que ahora, con una diferencia de un millón y medio de seguidores, eso lo tengo que cobrar”.

Aseguró, de esta manera, que la gente que habló lo hizo porque no sabe “y porque es gratis”. Fue por este motivo que prefirió hacer oídos sordos, ya que “son sus precios y lamentablemente la que puede, puede”.