Los fuertes vientos que azotaron el sábado a la tarde al norte de Corrientes y Chaco, dejaron anécdotas tristes de relatar y ver. Elma Serrano, una vecina del barrio Quilmes, entre las calles Unahue y Hernandarias, recibió una visita inesperada en su jardín: el techo de su vecino, junto con los tirantes que lo sostenían, cayó en la propiedad. Las chapas tenían una largo de más 10 metros.
![Voladuras de techos y horas interminables sin luz](https://viapais.com.ar/resizer/jRg8zcj_OOII-vhK7rYsvhvPnIM=/1023x767/smart/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/grupoclarin/GQZTSYJSMM3TMODDGU3DMMZRMU.jpg)
En el barrio San Antonio, los vientos tiraron abajo el primer piso de una casa. "El tornado se llevó primero el techo y luego toda la pared", contó a época Aldo Borda, un hombre de 34 años. Junto a su mujer y sus tres hijos se salvaron de quedar aplastados porque se refugiaron en la planta baja.
Una escuela del barrio Serantes también se sumó a las catástrofes, ya que un eucalipto gigante destruyó gran parte de la estructura.
![Voladuras de techos y horas interminables sin luz](https://viapais.com.ar/resizer/XQ7pUrhWtQNV4sl6B2Sd37y04mc=/1023x767/smart/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/grupoclarin/GFTDKYTDGAYGEMBRGZSGMZDDMI.jpg)
A esto se sumaron cientos de barrios que estuvieron más de un día sin luz, debido a la cantidad de postes de luz caídos y cables cortados. "Los operarios de la Dpec no dan abasto, trabajan sin parar desde que se inició la tormenta", explicó a VíaPaís desde el área de prensa de este servicio.
Por este motivo, hubo cortes de tránsito frente a una de las dependencias por Avenida Maipú y por Ruta Nacional Nº12 a metros de la avenida mencionada anteriormente.
Los arreglos por parte de la Municipalidad de Corrientes continúan sin cesar, al igual que de la Dirección Provincial de Energía.