Tito Speranza logró instalarse en el mundo mediático como custodia de Ricardo Fort en el "Bailando por un sueño". Desde allí, se animó también a trabajar como actor de temporadas de verano y, por otra parte, en calidad de co-conductor en el reality "Combate". Sin embargo, la vida le fue dando otros desafíos y caminos que repasó en charla con DiarioShow.
La cuarentena lo tiene "en casa, con muy poco trabajo". Pendiente del cuidado de sus padres y esperando que se reanuden las clases en la facultad. Según explicó su carrera "original" está relacionada con el acondicionamiento físico.
A la hora de recordar su paso por el "Bailando", Tito contó: "Me lo tomé como un desafío personal, como trabajo, una manera diferente de competir y en la que podía ayudar a las personas, en el caso mío, formé parte del sueño de un club de Misiones".
Tras los años transcurridos, definió su relación profesional con Ricardo Fort como "parte de la historia de mi vida. No voy a renegar ni ocultarla. Pasó por distintos momentos, con diferencias marcadas que me llevaron a tomar la decisión de alejarme del trabajo con él. Hoy en día, honestamente, no tienen sentido esas diferencias, aunque me hayan molestado y pretendían molestar. Se murió y me dio pena todo lo que le pasó".
En lo sentimental, Speranza mantiene su relación con Marcela, personal trainer como él, desde hace 20 años. "Creo que es elegirse día a día, para caminar juntos en la vida", describió, y sobre la imposibilidad de tener hijos explicó: "Pasó. Entre nosotros no hubo un conflicto. Y, como te dije antes, nos seguimos eligiendo y estar juntos como una familia".
Inquieto, contó con entusiasmado que está terminando de estudiar periodismo. "Si Dios quiere y no ocurre nada más raro que una pandemia, en diciembre me recibo. La idea siempre fue sumar conocimientos y poder unir este nuevo oficio ('la tele', como lo llamo) y el deporte, que fue lo que hice toda mi vida".