Rosas de primavera: por qué esta semana es clave para mimarlas en el jardín y disfrutarlas en la cocina

En estos días los rosales lucen en todo su esplendor y podremos aprovechar sus pétalos para perfumar las ensaladas más exquisitas.

Rosas (Foto: EFE/José Jácome)
Rosas (Foto: EFE/José Jácome)

Si en invierno hicimos una buena poda en nuestros rosales, en estos días disfrutaremos de sus notorios efectos. Las plantas seguramente lucen equilibradas, con copa abierta y sana, ya que reciben el sol pleno y entre sus ramas circula el viento, ambos factores indispensables para una buena floración. Disfrutémoslas y continuemos con las podas para estimular nuevas flores y mantener la sanidad deseada.

Para lograrlo, saquemos siempre las flores viejas cortándolas por encima de una hoja que tenga al menos cinco folíolos (como si fueran cinco hojitas pegadas en un solo eje). Cortando en este punto, la rama que salga producirá en sus extremos una segunda floración a principios de febrero.

También debemos sacar las ramitas tiernas que tienden a ir hacia el centro y, como siempre, eliminar las ramas que salen por debajo del injerto. No olvidemos colocar resina de pino en el tronco principal, para evitar que suban las hormigas. Y por último, un tip culinario: con unos pocos pétalos de rosa podemos darle un toque fresco y delicioso a nuestras ensaladas.

TIPS POR REGIONES

Norte + Lorito ventajero

Si está a tu alcance, envolvé las plantas con mallas antipájaros: en estos años secos, es habitual que los loros y otras aves picoteen la fruta cuando comienza a colorearse. Si bien es una tarea ardua, bien vale el esfuerzo si queremos comer las frutas antes que las loras.

Centro + Raleo de frutos

Si el duraznero está muy cargado de fruta a pesar de que te encargaste de podarlo, hacé un “raleo” eliminando los frutos más débiles y con menor insolación. De esta manera, vas a lograr una mejor calidad de las frutas que quedan en el árbol.

Patagonia + La Luna y la huerta

Prepará ahora los canteros de la huerta, ya que la próxima semana la Luna estará menguando y podrás sembrar acelga (en lo posible, la variedad Bressane), lechuga criolla, remolacha, rabanitos y zanahoria. Para lograr óptimos resultados con esta última, deberás trabajar el suelo en profundidad.

CONSULTAS DE LECTORES

Luis Álvarez, de Córdoba Capital, adjunta la foto de un insecto que está atacando las moras de las veredas. Aparentemente esta situación está ocasionando la caída prematura de las hojas y el deterioro de sus troncos. Consulta cómo puede combatir esta plaga.

-Luis, la fotografía corresponde a una ninfa de la popularmente llamada “chinche verde”(Nezara viridula). Al tratarse de moras que están en la vereda, para eliminarla no podés usar productos tóxicos sin autorización del municipio. Sugiero que saques a las ninfas con el chorro fuerte del agua de la manguera, una escoba o un escobillón, ya que se mueven en grupo y son fáciles de identificar. Para evitar que vuelvan a subir, tomá unos veinte insectos con un guante de goma y apretalos para que liberen su aroma en 3 litros de agua, luego de 24 horas pintá un “collar” en el tronco con un pincel embebido en el líquido resultante. El olor a chinche muerta desalentará a las que se acerquen.

Ángeles Pintos, de Unquillo, Córdoba, desea combatir numerosos hormigueros gigantes que tiene en un terreno bastante grande: Ya ha tratado de eliminarlos con varios métodos infructuosos y no quiere recurrir a agroquímicos, pero resurgen una y otra vez. Mientras tanto, las hormigas se han comido plantas de la huerta, frutales, rosales, una Santa Rita y hasta un cactus.

-Ángeles, lo primero es saber que las hormigas consumen las hojas de las plantas desde hace 150.000.000 de años, mientras que el ser humano las combate hace solamente 500. Coincido en que los métodos químicos (sobre todo, en zonas serranas como la tuya) contaminan napas acuíferas y son muy agresivos con el ambiente, pero también hay que tener en cuenta que los métodos biológicos son eficientes después de muchos años. Te sugiero que mires los videos de INTA, en ellos describo varios métodos efectivos para combatirlas que sería imposible resumir en estas pocas líneas.

Lorena, de Santiago del Estero, quiere saber cómo podar un limonero que creció mucho y sin forma, y que ahora está está tapando a otra planta de pomelo aún chiquita.

-Lorena, podés encarar la poda del limonero, con menor riesgo de enfermedades, tanto en primavera como en otoño. Te recomiendo que emplees tijeras y serruchos muy bien afilados y que previamente los esterilices con agua y un chorro de hipoclorito.

La poda se debe realizar dejando, en lo posible, solo 3 o 4 ramas fuertes que sean las que carguen los frutos a futuro; y extrayendo las ramas de crecimiento vertical muy recto. Además, te sugiero que cambies de lugar el pomelero, porque se trata de un árbol que requiere mucho sol. Por otra parte, cuando los citrus están muy juntos comparten plagas y son más difíciles de erradicar. Mejor prevenir ahora, que curar. Mucha suerte.

Valeria, de Córdoba, tiene un limonero que en la cara posterior de sus hojas presenta una capa blanca que parece un hongo; y esto atrajo primero a las abejas y avispas, pero ahora se llenó de moscardones grandes y desagradables. Consulta qué puede hacer.

-Valeria, la pelusa blanca pegajosa de la cara posterior de las hojas es la muda de las larvas de mosca blanca: es pegajosa porque exudan una melaza que alimenta a las moscas, abejorros y hormigas negras. Para eliminarlas, te sugiero empezar quitando a las adultas -unas pequeñas mosquitas blancas- con una aspiradora, ya que son muy livianas. Las larvas que quedan en las hojas podés eliminarlas con un preparado consistente en la rayadura de tres cucharadas soperas de jabón blanco o de coco disueltos en 2 litros de agua. Tenés que rociar las hojas con este líquido, mojando bien por ambas caras en cuatro oportunidades y con siete días de intervalo entre cada aplicación. Además, sugiero colocar un collar de resina de pino en el tronco para evitar que suba la hormiga negra y repueble las hojas con esta plaga.