Inflación: Martín Guzmán admitió que el Gobierno debe mejorar las expectativas

También le puso fecha al acuerdo con el FMI. Se refirió al “mandato definido” de Alberto Fernández en la coalición Frente de Todos y al diálogo con la oposición.

Martín Guzmán ratificó que en noviembre la inflación “será menor a octubre”. (Foto de archivo: REUTERS/Remo Casilli)
Martín Guzmán ratificó que en noviembre la inflación “será menor a octubre”. (Foto de archivo: REUTERS/Remo Casilli)

El Gobierno nacional ratificó este lunes que en 2021 buscará reducir la inflación al 29% anual, tal como lo contempló en el Presupuesto que fue sancionado por el Congreso, pero reconoció que para ello deberá trabajar para “mejorar las expectativas”.

Martín Guzmán participó este lunes de la Cumbre GZERO Latinoamérica 2020 de Eurasia Group, una consultora de riesgo político y financiero fundada en 1998.

El funcionario ratificó allí que en noviembre la inflación “será menor a octubre”. En ese mes, el dato había dado del 3,8% mensual y fue el más alto de 2020. Algunas consultoras privadas habían previsto que en noviembre el dato iba a estar más cerca del 4%.

La forma en que seguiremos atacando el problema inflacionario en 2021 será con la política macro y con el rol del Estado para mejorar las expectativas. Hay un tema fiscal, monetario y cambiario consistente con lo que se propone en el Presupuesto”, dijo.

Y tras ello afirmó que para llegar al valor del 29% anual que previó el Gobierno en el Presupuesto “hay que trabajar en el otro bloque: el del rol del Estado para mejorar las expectativas. Es importante anclar las expectativas”.

Según Guzmán, las expectativas “se han anclado” y ahora “hay un sendero de construcción de expectativas que va en positivo”. Y agregó: “Empezamos a sumar reservas. La situación es distinta que la de hace tres meses. Vemos al frente cambiario robusto. Esperamos acumulación de reservas positivas en 2021, 2022 y 2023”.

El funcionario señaló que cuando el gobierno de Alberto Fernández inició su gestión, las expectativas plasmadas en el Relevamiento de Expectativas de Merado (REM) –del que participan bancos y consultoras- andaba “alrededor de 50%”.

Las expectativas estaban muy por encima de lo que terminará ocurriendo. Eran pre pandemia y sin necesidad de recurrir al financiamiento por parte del Central al Tesoro”, dijo el funcionario nacional.

Y tras ello agregó que el mercado “ha tenido una expectativa inflacionaria que no se ha condicho con la realidad. La realidad estuvo más alineada con lo que el gobierno había proyectado. El 2020 va a terminar con una inflación casi 20 puntos por debajo de 2019”.

“Buscamos reducir la inflación a un ritmo factible. Consideramos que un ritmo factible es el que presentamos en el Presupuesto”, insistió el funcionario.

Otras definiciones de Guzmán

Reactivación: Los últimos meses muestran un panorama mejor. Hay una recuperación cada día más sólida. Tenemos tres meses de actividad económica repuntando. La recaudación creció sobre la inflación en los últimos meses. La brecha cambiaria se ha reducido fuertemente. Esperamos un 2021 positivo, con el país creciendo.

Déficit fiscal: Queremos impulsar la economía mientras reducimos el déficit fiscal. A pesar del aumento del gasto en términos reales, también hay una reducción del déficit por el aumento de ingresos fiscales. Tiene que haber una reducción de lo que el Central financia al Tesoro, convergiendo a una situación en la que no haya un financiamiento sistemático al Tesoro por parte del Central.

Habíamos hecho un análisis de sostenibilidad de la deuda previo a la pandemia. Apuntábamos a un déficit primario de 1,1% y 1,5% del PBI. La pandemia elevó la necesidad de gastos. Terminaremos este año debajo del 7%, pero claramente hay una diferencia importante. Llegar al equilibrio fiscal va a llevar más tiempo que lo que se pronosticaba antes de la pandemia.

Reservas internacionales: Necesitamos ir acumulando reservas internacionales que nos permitan los controles de capitales que son defensivos que se corresponden con una situación de emergencia, e ir hacia unos macroprudenciales. El programa que presentamos en el Congreso va a tener metas de reservas internacionales.

Negociación con el FMI: Estamos trabajando de forma constructiva. El FMI tuvo un rol importante en la evaluación de la sostenibilidad de la deuda pública argentina. Una negociación con el FMI es una negociación con los Estados del mundo. Argentina busca trabajar de la mano con los Estados del mundo y ser parte de la construcción de un ambiente global de estabilidad. Vamos a enviar el programa con el FMI al Congreso. Eso no se hizo nunca. Queremos una legitimación y un respaldo amplio para que la estabilización económica sea una política de Estado. En marzo o abril serían tiempos razonables (para un acuerdo) pero no nos atamos a ninguna fecha. Estamos trabajando de forma positiva. Cada semana se dan pasos para sellar las cuestiones del programa

Comercio Exterior: Necesitamos que el crecimiento de las exportaciones sea consistente con el de las importaciones que la recuperación implica.

Expectativas: Se busca avanzar con medidas estructurales para promover productividad y previsibilidad; reglas de juego entre sector público y privado. Venimos trabajando en el sector transable con el sector energético, agroindustrial, la economía del conocimiento para articulas reglas de juego pro crecimiento. Anunciamos el Plan Gas que viene funcionado bien. Le va a permitir al país depender menos de las importaciones de gas y elevar el nivel de competitividad. Se anunció la semana pasada con el sector agroindustrial una lista de 38 aspectos burocráticos para simplificar y mejorar las exportaciones. Confiamos en que el programa plurianual contribuirá a la previsibilidad.

Expectativas de Gobierno: Las expectativas son positivas. En el frente externo tenemos un superávit comercial robusto; no hay pagos de deuda externa y se está negociando con el FMI para despejar el horizonte financiero. Hay controles de capital, que no son los más adecuados para un ambiente propicio para la inversión, pero ayudaron para mantener presiones en el frente cambiario a partir de 2018.

Pobreza: Tenemos una situación donde 40% de la población está en niveles de pobreza. Es un problema que debemos resolver. La forma de ordenar es arreglando los problemas fundamentales que la economía y la sociedad.

Deuda: No esperamos endeudarnos en moneda extranjera en los próximos tiempos. Buscamos tener más financiamiento en moneda local, que es lo que se hizo este año. La deuda en moneda extranjera no es algo a lo que se apunta. Hay que tener cuidado con el endeudamiento en moneda extranjera. El país debería tener un aumento de las exportaciones para hacerle frente a esos financiamientos.

Diálogo con la oposición: Hemos tenido durante 2020 la estabilidad necesaria para poder lidiar con una situación extraordinaria como la de la pandemia. Hubo un involucramiento positivo entre el Gobierno y la oposición. La reestructuración de la deuda tuvo unanimidad en el Senado y Diputados. Con la pandemia hubo un apoyo a nivel amplio. La salud fue una política de Estado.

El juego político: El Gobierno tiene una coalición con un mandato muy definido que es el del presidente Alberto Fernández. Se genera un ámbito valioso en la construcción de equilibrios. Enviar el programa del FMI al Congreso es algo positivo; es una puerta hacia la estabilidad. Vamos a invitar a la oposición a ser parte de este proceso de discusión social y de apoyo al programa que el gobierno nacional conduce.