Se te pegó un abrojito: el tierno momento de Soledad Pastorutti con su hija en Mendoza

La cantante y Regina, la más pequeña de sus hijas, se encontraron en el escenario y enternecieron al público en la noche de Tunuyán.

Soledad Pastorutti y Regina compartieron escenario.
Soledad Pastorutti y Regina compartieron escenario.

En medio de su gira de verano por el país, Soledad Pastorutti protagonizó un tierno momento que derritió los corazones de sus fans, cuando su hija Regina, que la acompaña durante el tour, corrió a abrazarla y compartir algunas estrofas de la canción “Brindis” en Tunuyán, Mendoza.

Era la última canción del show, y sin que Sole se lo esperara, Regi apareció corriendo por detrás de ella en el escenario y se fundió en un abrazo con su mamá. La cantante no pudo contener la emoción y lanzó una broma: “es mi hija, por eso me quiere tanto”. Luego, la tomó de la mano y la invitó a entonar el tema de despedida del magnífico show que brindó en la localidad mendocina.

El momento quedó captado por cámaras que tomaban imágenes del espectáculo y se posteó en una página de Instagram hecha por seguidores de la folklorista santafesina, en la que cosechó miles de likes y comentarios sobre el hermoso momento con la menor de sus herederas. La Sole, a su vez, también compartió la publicación en sus redes sociales, entre las muchas imágenes del impactante show en el que también participaron los hermanos Vilchez.

¿Cómo es la familia de Soledad Pastorutti?

Sole fue mamá por primera vez hace 13 años cuando nació Antonia, fruto de su amor con Jeremías Audoglio, su primer y único novio desde 1998, esposo desde el 2007 y con quien también tuvo unos años después a la pequeña Regina.

Según contó su mamá, Regi, de 9 añitos, “toca el piano y canta”, aunque aún tiene esa timidez propia de la infancia. No obstante, de a poco se anima a subir a los escenarios en las giras que comparte con Soledad.

Soledad Pastorutti y su familia en su casa en Arequito.
Soledad Pastorutti y su familia en su casa en Arequito.

Actualmente, la familia pasa sus días en Arequito, de donde es originaria la folklorista y su vida es de lo más normal; allí, Sole fomenta siempre que puede la veta artística de sus retoñas: “Ellas estudian piano, canto y danza. Incentivo mucho el arte en ellas, toda persona debería hacer algo artístico”, detalló Pastorutti.