Misión Artemisa a la Luna: la nave Orión de la NASA se aproxima a nuestro satélite natural

La cápsula no tripulada se acerca a la órbita lunar, en un viaje que hasta ahora “supera las expectativas”, según la agencia estadounidense.

La cápsula Orión, diseñada y fabricada por Lockeed Martin Space, durante su viaje a la Luna. La imagen fue tomada desde uno de sus paneles solares.
La cápsula Orión, diseñada y fabricada por Lockeed Martin Space, durante su viaje a la Luna. La imagen fue tomada desde uno de sus paneles solares. Foto: LMS

En el cuarto día de la misión Artemisa 1 rumbo a la Luna, la cápsula Orión de la NASA “supera las expectativas”, asegura el organismo estadounidense.

Esta cápsula deberá llevar astronautas a la Luna en los próximos años, que serán los primeros en pisar su superficie desde la última misión Apolo en 1972. Este primer vuelo de prueba sin tripulación debe servir ante todo para determinar que el vehículo es seguro.

”Nos hemos reunido para revisar el funcionamiento de la cápsula Orión (...), y ha superado las expectativas”, dijo en rueda de prensa Mike Sarafin, a cargo de esta misión denominada Artemisa 1.

La Tierra, vista desde la nave Orión en su viaje a la Luna.
La Tierra, vista desde la nave Orión en su viaje a la Luna. Foto: NASA

Los cuatro paneles solares de la cápsula, de unos cuatro metros de largo, se desplegaron correctamente y “proveen más energía” de lo esperado, afirmó Jim Geffre, responsable de la cápsula en el centro espacial Johnson de Houston, Texas, donde se encuentra el mando desde donde se pilotea la cápsula.

Después de ser impulsada hacia el espacio profundo por el cohete SLS, que despegó el pasado miércoles, Orión ya está a más de 320 mil km de la Tierra (la Luna está a 380 mil km de nuestro planeta). Y se prepara para efectuar el primero de sus cuatro impulsos principales programados en la misión, con la ayuda de sus motores.

El lanzamiento del SLS, el cohete más potente jamás fabricado, con la cápsula Orión en la parte superior (DPA).
El lanzamiento del SLS, el cohete más potente jamás fabricado, con la cápsula Orión en la parte superior (DPA).

Esta maniobra, que tendrá lugar este lunes en las primeras horas de la mañana, acercará a la cápsula a unos 100 km de la superficie lunar, con el fin de aprovechar su fuerza gravitacional. Como esto tendrá lugar detrás de la cara escondida de la Luna, se prevé que la NASA pierda el contacto con la cápsula por unos 35 minutos.

”Pasaremos por encima de algunos sitios de aterrizaje del Apolo”, destacó Jeff Radigan, director de vuelo de la Nasa, incluso cuando estos se sitúan en la sombra. Un video del sobrevuelo será difundido después.

Cuatro días más tarde, un segundo impulso de los motores ubicará a Orión sobre una órbita alrededor de la Luna a 64.000 km de distancia, un récord para una cápsula habitable. Entonces, se iniciará el viaje de regreso hacia la Tierra, con un aterrizaje en el océano Pacífico previsto para el 11 de diciembre.

En el siguiente video publicado en Twitter, se puede ver el momento en el que la cápsula Orión, con su módulo de comando fabricado por la Agencia Espacial Europea (ESA), se desprende definitivamente del cohete SLS que la impulsó hasta el espacio, comenzando sola su viaje a la Luna.

Del éxito de esta misión depende el futuro de Artemisa 2, que transportará a astronautas a dar la vuelta a la Luna sin posarse en su superficie, y luego de Artemisa 3, que marcará al fin el regreso de humanos sobre la superficie lunar. Dichas misiones deben tener lugar en 2024 y 2025, respectivamente.

Sarafin precisó además que 10 micro satélites científicos habían sido desplegados durante el despegue del cohete, pero la mitad de ellos tuvieron problemas técnicos o de comunicación. Dichas experiencias, llevadas a cabo por separado por equipos independientes no tienen ningún impacto sobre la misión principal.